Además de la provincia de Canta, derrame de zinc podría afectar a Carabayllo y San Martín de Porres

Minsa emitió una alerta epidemiológica para todas las zonas donde pudieran presentarse casos que afecten la salud de las personas.

El titular de la Dirección General de Gestión de Riego de Desastres y Defensa Nacional en Salud del Minsa, Jorge Luis Escobar, tildó a este desastre ambiental como “crítico y trágico” e indicó que están “en alerta máxima” en los 17 establecimientos de salud. (Foto: Gestión)

Siete días después de una fuga de zinc en el río Chillón, en la provincia de Canta, el Ministerio de Salud (Minsa) emitió una alerta epidemiológica para todas las zonas donde pudieran presentarse casos que afecten la salud de las personas.

Como recordatorio, el pasado 13 de junio -casi 5 meses después del derrame de petróleo en el mar de Ventanilla- volcó un camión que transportaba 35 toneladas de concentrado de zinc en el km 24.70 de la carretera Canta-Huayllay-Cerro de Pasco. Esta área está ubicada en la comunidad campesina de San Felipe de Cullhuay, municipio de Huaros, provincia de Canta (Lima).

El titular de la Dirección General de Gestión de Riego de Desastres y Defensa Nacional en Salud del Minsa, Jorge Luis Escobar, tildó a este desastre ambiental como “crítico y trágico” e indicó que están “en alerta máxima” en los 17 establecimientos de salud, tanto en Canta como en Carabayllo y la zona de San Martín de Porres, que son parte del río Chillón.

El experto también explicó que entre las sustancias vertidas a las aguas de uno de los ríos más importantes de la capital se encuentran “sulfato de zinc, sulfuro de hierro y sulfuro de plomo”, que son sustancias que al ser ingeridas por humanos pueden causar pancreatitis, gastritis y problemas en todo el sistema digestivo y el sistema nervioso.

Además, ante posibles casos de contagio, el representante del ministerio advirtió que los afectados pueden sufrir náuseas, vómitos, dolor epigástrico, diarrea y coma (somnolencia). Ante esto, dijo, quienes presenten los síntomas antes mencionados deben acudir al centro médico más cercano o llamar al 113 para que los médicos del Minsa examinen rápidamente al paciente y lo trasladen al Hospital Sergio Bernales para su tratamiento.

“La recomendación es no acercarse al río, no tener un nivel de contacto, no consumir. A pesar de que el metal se sedimenta, es preferible tener la máxima garantía. De manera que su consumo (del agua) debe estar totalmente prohibido”, señaló en una entrevista con TV Perú.

Reclaman atención

Decenas de afectados por el desastre ambiental salieron a las calles donde ocurrió el accidente para protestar. Los residentes dicen que el derrame ha afectado a su ganado y granjas, así como los criaderos de truchas de la zona.

Asimismo, denuncian que incurren en pérdidas importantes en sus emprendimientos comunitarios y sufren escasez de agua potable en la provincia. Cabe señalar que poco tiempo después del ocurrido del derrame, Elmer Páez, jefe del Frente de Defensa de Canta, afirmó que hubo una pérdida de 600 toneladas de trucha de los piscicultores de Cullhuay, Obrajillo, Paraíso, Trout, Pariamarca, entre otros lugares.

Finalmente, cabe señalar que la legisladora Vivian Olivos, presidenta de la Comisión Agraria, ha solicitado al Ejecutivo declarar en emergencia ambiental a la cuenca del río Chillón.