Ollanta Humala de nuevo en la mira por detenciones del caso Madre Mía

"El Poder Judicial dictó prisión preventiva a Amílcar Gómez Amasifuén y otros 8 implicados en las desapariciones forzadas"

Almícar Gómez estuvo fuertemente relacionado con Ollanta Humala. (Foto: El Correo).

El caso Madre Mía continúa Ollanta Humala y tendría implicancias en su situación legal. El exsuboficial Almícar Gómez Amasifuén, acusado de sobornar a testigos en las desapariciones forzadas de 16 personas sobre la unidad contrasubversiva que comandaba Humala, fue detenido el pasado 5 de diciembre en Tarapoto por una orden de prisión preventiva de 18 meses en su contra. Otros ocho implicados en el caso “Madre Mía”, también se vieron incluidos en la orden de prisión preventiva por el delito de desaparición forzada de personas en agravio de Jorge Ávila, Natividad Ávila y Benigno Sullca.

La orden de prisión preventiva fue presentada por la Segunda Fiscalía Supraprovincial de Derechos Humanos de Lima, contra los militares Tobías Huaringa Rosales, Ramón Olimar Jaba, Limber Isuiza Isuiza y Nicanor Guerra Cárdenas y Gaspar Santillán Grandez, Segundo Padilla Santillán, Rusell Vela Silva y Edgar Padilla Paredes, aparte de Amílcar Gómez.

La reapertura del caso podría significar complicaciones para el expresiente Humala. Durante 1992 y 1993, fue jefe de la unidad contrasubversiva Madre Mía. Esta unidad tenía como objetivo identificar y capturar a terroristas de Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru. Sin embargo, en el año 2011 Perú21 reveló que su suboficial habría sobornado al hijo de Jorge Ávila (hermano de una de las personas torturadas y desaparecidas) por orden del ‘capitán Carlos’.

Este sobrenombre era relacionado por muchos familiares y soldados con Humala. Según comentó Ávila para El Comercio, entre el año 2006 y 2011 -año donde Humala ganó las elecciones presidenciales- le pagaron una suma de 4500 dólares para negar que el exmandatario era el famoso ‘Capitán Carlos’.

Implicancias del caso

El abogado del Instituto de Defensa Legal (IDL), Carlos Rivera, comentó para Perú21 que la detención de Amílcar Gómez significaría la reactivación del caso: “Lo más destacable es que el caso haya sido reactivado. Si eso no hubiese ocurrido, la Fiscalía estuviese atada de pies y manos. No podría hacer absolutamente nada”, destacó Rivera para el diario.

Asimismo, comentó que no cree que la Fiscalía termine el caso solo en los soldados de la base ya que las detenciones cuentan como un indicador de que hay elementos de convicción para continuar con la investigación y que, en un corto o mediano plazo, esto terminaría afectando al exmandatario.