Un día que jamás olvidarán los hinchas aliancistas será el 10 de septiembre del 2018, debido a que en esa fecha aproximadamente unos 2000 miembros de la iglesia evangélica El Aposento Alto entraron sin permiso al Matute (estadio de Alianza Lima) con escalera, planchas de madera y palos. Eso no fue todo, al invadir el lugar pintaron algunas paredes de blanco borrando algunos símbolos históricos del club de la Victoria.
Esta catástrofe extradeportiva enfureció, como es lógico, a los aficionados ‘grones’ que no dejarían que manchen el honor del club. La situación llegó a tal punto que la Policía Nacional del Perú tuvo que intervenir expulsando a cualquier persona que se encontraba dentro del recinto deportivo.
A partir de lo sucedido, el club ‘íntimo’ comenzó una disputa legal por quedarse con tal sector del Alejandro Villanueva que se utiliza como estacionamiento. La razón por la cual la iglesia evangélica se adjudicaba como los dueños era que ellos afirman haber pagado millones de soles por ese terreno y otros sectores. Luego de casi dos años y medio, los jueces señalaron hoy que los ‘blanquiazules’ son los propietarios absolutos.
Alianza a través de un comunicado informó lo siguiente: “El 33° Juzgado Civil de Lima reconoció al club como propietario por prescripción adquisitiva de los lotes 23, 24 y 29 que conforman la explanada del estadio Alejandro Villanueva, declarando infundada la demanda de prescripción adquisitiva de dominio interpuesta contra la Iglesia Cristiana Mundial El Aposento Alto”.
“A lo largo del proceso, nuestro club logró acreditar que el propio Nicanor Alberto Santana Leiva, actual presidente del Consejo Directivo de la Iglesia Cristiana Mundial El Aposento Alto, reconoció a nuestro Club como propietario de la explanada del Estadio”, añade el documento.
M.L.M
