Por Manuel Alejandro Navarro

En una conferencia de prensa de la portavoz oficial de la Cancillería rusa, María Zajárova, respondió las preguntas hechas por parte de la Federación de Periodistas del Perú, respecto a si animará o pedirá a los países latinos que reconozcan los resultados de los referéndums en las regiones de Donetsk, Luhansk, Kherson y Zaporiyia, “vamos a intentar persuadirles mediante el razonamiento”, asimismo expresó que los “referendos fueron supervisados por expertos y observadores internacionales”.

¿Cómo ve las relaciones entre Rusia y América Latina en la actualidad?

América Latina es una región amistosa para nosotros. Rusia y los países latinoamericanos valoran mutuamente las ricas y multidimensionales relaciones que nos unen desde hace más de 150 años. Mantenemos un diálogo político sobre una amplia gama de temas de la agenda global, llevamos a cabo proyectos de beneficio mutuo en la economía, promovemos la cooperación cultural y humanitaria y los intercambios educativos.

Vemos con satisfacción que el papel de su región en los asuntos internacionales está creciendo objetivamente. Consideramos este proceso como un aspecto irreversible de la formación de un orden mundial multipolar y más democrático. Nosotros y los países latinoamericanos compartimos la importancia de un diálogo, mantenemos una comunicación abierta y honesta, incluso en los asuntos en los que nuestras posiciones difieren y en los que no estamos de acuerdo. Escuchamos y oímos los argumentos del otro.

Esta naturaleza de nuestras relaciones quedó confirmada una vez más por las reuniones del Ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, con el Primer Ministro de San Vicente y las Granadinas y sus homólogos de Bolivia, Brasil, Venezuela, Cuba, México, Nicaragua y Panamá, al margen de la semana política durante la 77ª Asamblea General de la ONU en Nueva York. Hubo muchas reuniones a lo largo de estos cuatro días. Mantenemos un diálogo estable con un gran número de países de la región.

Comprendemos muy bien que los países latinoamericanos experimentan la presión de Washington, que no sólo quiere revivir la tristemente célebre Doctrina Monroe para someter a estos países a sus propios intereses, sino extender esta viciosa ideología al resto del mundo y convertirlo en su patio trasero.

En lo que a nosotros respecta, estamos dispuestos a desarrollar aún más nuestras relaciones con nuestros amigos latinoamericanos, en la medida en que estén interesados. Buscamos desarrollar e intensificar esta cooperación, y nuestro enfoque en este sentido es totalmente sincero.

Nunca hemos perseguido una ideología de sometimiento de otro país, de un socio, a nuestros propios intereses. La nuestra es una ideología de integración de intereses. Nunca obligamos a nadie a elegir un bando, es una práctica viciosa, entendemos claramente que no es nuestro camino. Apoyamos las relaciones mutuamente beneficiosas y respetuosas basadas en el derecho internacional.

¿Alentará o pedirá Rusia a los países latinoamericanos que reconozcan los resultados de los referendos en suelo ucraniano?

He hablado mucho de los referendos. La celebración de referendos en la RPD, la RPL y las regiones de Kherson y Zaporozhye es una cuestión de voluntad y autodeterminación de la gente que vive en esas regiones. Es una decisión que debe tomar el pueblo. Durante mucho tiempo han tolerado que se les trate no como personas, sino como “especies infrahumanas”, como los llamó el Presidente de Ucrania. Este proceso se está desarrollando independientemente de si a alguien le gusta o no. Estas personas también tienen derechos. Nacieron libres, son como tú y yo, tú en Perú y yo en Rusia. Han tenido hijos, han criado a toda una generación bajo el interminable fuego de artillería ordenado por el gobierno que los consideraba sus ciudadanos. Y esto ha sucedido en el centro de Europa, el continente donde muchos países se consideran los fundadores de la civilización moderna. Son los países que han puesto en marcha muchos instrumentos jurídicos internacionales para defender los derechos humanos. Estoy seguro de que la historia pondrá todo en su sitio, y la cooperación ruso-latinoamericana incluirá las nuevas regiones de la Federación Rusa.

Usted ha formulado una pregunta interesante: si Rusia hará algo para alentar o pedir que los países reconozcan los resultados. Vamos a compartir los hechos; vamos a intentar persuadirles mediante el razonamiento, pero también me gustaría recordarles que estos referendos fueron supervisados por expertos y observadores internacionales. Fíjese en la presión sin precedentes que tienen que soportar ahora sólo porque han visitado esa región para ayudar a mantener la misma democracia que tanto se glorifica en Occidente. Ahora bien, sobre la forma en que ha formulado su pregunta: alentar e instar, sí. Eso es correcto y legítimo. En cambio, amenazar, chantajear, anular, intimidar o destruir no lo es. Esto es exactamente lo que Occidente ha estado haciendo y obligando a hacer al régimen de Kiev, y eso ha provocado en gran medida los cambios tectónicos a los que estamos asistiendo.

Sería estupendo que usted, como periodista, prestara atención a las reacciones de esos observadores internacionales. Hable con ellos. Son personas de diferentes países y regiones que actuaron abiertamente; dieron conferencias de prensa y entrevistas. Están disponibles para hacer comentarios, y le dirán qué y cómo observaron allí.

¿Cuándo se expedirá la ciudadanía o los pasaportes rusos a las personas que votaron a favor de la adhesión a Rusia en los referendos?

Hace tres años, en abril de 2019, la orden ejecutiva del presidente ruso concedió a los ciudadanos de la RPD, la RPL y Ucrania el derecho a solicitar la ciudadanía rusa mediante un procedimiento simplificado. Esta opción ha estado disponible durante tres años.

De acuerdo con el párrafo 3 de la Orden Ejecutiva Presidencial Nº 183, las unidades del Ministerio del Interior ruso deben considerar dichas solicitudes y adoptar decisiones en un plazo de tres meses a partir de la fecha de presentación de la solicitud.