Un protocolo para detectar una enfermedad reumática subdiagnosticada

La enfermedad reumática se caracteriza por el depósito de cristales en las articulaciones, debido a un desbalance en los niveles de calcio y fosfato.

Un trabajo desarrollado en el Laboratorio de Inmunopatología y Citometría de Flujo de la Universidad Nacional de San Luis, ha logrado obtener un diagnóstico confirmatorio de la enfermedad reumática que a menudo no es detectada como tal debido a la falta de metodologías adecuadas para su detección.

El proyecto es dirigido por la doctora Carolina Gorlino y se centra en estudiar aspectos del rol del metabolismo de los hidratos de carbono en el perfil inflamatorio de células del sistema inmune (neutrófilos), frente a la activación por estos cristales.

“Queremos estudiar estas células que provocan dolor e inflamación y hacen mucho daño al punto de que pueden llegar a generar un reemplazo de la articulación (…). La idea es evitar que esas células provoquen ese daño, aunque no sean las causantes de la enfermedad”, indicó la científica.

La enfermedad genera molestia, dolor, inflamación y con el tiempo puede provocar daño articular. Se ve generalmente en adultos mayores. Los pacientes que la padecen tienen más de 60 años, existe la misma incidencia en hombres que en mujeres y muchas veces pasa inadvertida, porque está subdiagnosticada, ya que la forma precisa de obtener el diagnóstico es a partir de la observación de los cristales.

“No hemos realizado un servicio masivo, la idea es poder ofrecerlo como un potencial servicio a nivel regional”, comenta Gorlino y añade: “Ayudamos a dar el diagnóstico certero para poder dirigir el tratamiento terapéutico y ver qué medicamentos tiene que administrarle el médico al paciente. Tratamos de ayudar en ese sentido”, concluyó.