Pablo Sánchez, presidente de España, expulsó a tres diplomáticos bolivianos. Esto se dio en respuesta a los últimos acontecimientos en Bolivia.
La presidenta provisional dio 72 horas para que abandonen el país a dos diplomáticos y 4 policías españoles. Asimismo, se le pidió que abandonara el país a la embajadora mexicana en Bolivia, María Teresa Mercado. La Secretaria de Relaciones Exteriores (SER), le indicó que se regresara a México para “resguardar su seguridad e integridad”.
Todo esto sucedió, luego que Bolivia denunciara el viernes pasado, que funcionarios de la Embajada Española, junto con personas “encapuchadas”, ingresaran a la residencia de Mercado, donde acoge a algunos ex ministros de la etapa de Evo Morales, procesados por terrorismo.
D.P.G.