Petro interpela a la Fiscalía por el llamado opositor a un golpe de Estado y la institución responde

"Los amigos de la impunidad, aterrorizados por la verdad, no están pensando en elecciones, sino en una ruptura institucional", dijo el mandatario colombiano.

Foto: El presidente de Colombia , Gustavo Petro.

La relación entre el presidente Gustavo Petro y un gran sector de hombres retirados de la fuerza pública pasa por su peor momento desde que arrancó el Gobierno en agosto del año pasado. “¿Por qué conspiran para un golpe de Estado? Porque les aterroriza que acabemos la impunidad”, escribió el mandatario de Colombia en su cuenta de Twitter este jueves después de compartir una entrevista del coronel retirado John Marulanda en W Radio.

En ella, el antiguo director de la Asociación de Oficiales Retirados de las Fuerzas Militares de Colombia (Acore) dijo, en referencia a la crisis política peruana, que allá “las reservas fueron exitosas al lograr defenestrar a un presidente corrupto”. Se refería al expresidente de izquierda Pedro Castillo, que fracasó en su intento de autogolpe el año pasado, y que Petro ha defendido varias veces. “Aquí, vamos a tratar de hacer lo mejor por defenestrar a un tipo que fue guerrillero”, añadió Marulanda. Con esa última frase prendió todas las alarmas.

Desde que Petro llegó al poder el año pasado existe el miedo de que los militares no acepten un Gobierno de cuatro años en manos de un exguerrillero, la primera vez que esto ocurre en el país. Hasta ahora, lo han aceptado. Colombia se enorgullece recurrentemente por ser la democracia más estable del continente, con Estados Unidos, y no ha tenido un golpe de Estado en décadas (si se cuenta la corta dictadura del general Rojas Pinilla en 1953).

Durante el Gobierno del expresidente liberal Ernesto Samper (1994-1998) se habló varias veces de ruido de sables, algo que nunca ocurrió. Petro, por su lado, ha logrado mantener una relación cordial con las Fuerzas Armadas activas en estos 10 meses de Gobierno, incluso después de nombrar al renombrado investigador anticorrupción Iván Velásquez como ministro de Defensa. Pero su relación ha sido mucho menos fluida con las fuerzas retiradas.

Tras las declaraciones de Marulanda, Petro alertó en Twitter de un posible golpe de Estado, aunque el pronunciamiento no fue de alguien que esté activo en las Fuerzas Armadas de Colombia. Su jefa de despacho en la Presidencia, Laura Sarabia, también denunció las declaraciones aclarando que no debe ponerse en duda el carácter democrático de la fuerza pública.

“Discrepar con el Gobierno es muy diferente a incitar un golpe de Estado. Y que alguien de la reserva haga ese llamado no solo es un agravante, sino que es una deshonra para el uniforme que alguna vez portó. La tradición democrática de nuestras Fuerzas JAMÁS debe ponerse en duda”, dijo ella en su cuenta de Twitter.

Sin embargo, como informó W Radio, Marulanda luego dio reversa. “Yo corrijo lo dicho. No se trata de defenestrar al presidente Gustavo Petro como se defenestró al presidente peruano Pedro Castillo”, aclaró. Corrección que llegó demasiado tarde. El incendio estaba ya prendido.

La entrevista a Marulanda ocurrió después de que cientos de hombres retirados de las Fuerzas Armadas se manifestaran en la Plaza de Bolívar el miércoles. Allí gritaron “¡Fuera Petro!” varias veces, y llevaron pancartas que hablaban del “desprecio progresista” a la fuerza pública. En ese tipo de manifestaciones siempre queda la duda de qué tanto esas posiciones políticas contra el presidente se alinean o no con las fuerzas activas.

Estas últimas no pueden legalmente involucrarse en manifestaciones políticas, partidos, o votar, mientras que los retirados sí pueden hacerlo. Y desde el Gobierno del expresidente Álvaro Uribe (2002-2010) los retirados han sido grandes aliados del uribismo, los mayores críticos del petrismo.