Los efectos de la queja constante en la salud y el estado de ánimo

El cerebro y la calidad de vida son los más afectados por este comportamiento. Recomendaciones para realizar un cambio y alcanzar el bienestar físico y mental

Según una encuesta llevada a cabo en el Reino Unido, por el diario The Irish Times, los británicos se quejan, durante 10.000 minutos (casi 7 días) al año. (Foto: Hola.com).

Quejarse puede ser una forma de aliviar el estrés, aligerar la carga mental y obtener nuevas perspectivas, también puede ayudarnos a conectarnos con otras personas que comparten nuestras preocupaciones o simplemente están dispuestas a escucharnos.Sin embargo sabía usted que puede afectar la salud y el equilibrio emocional.

El estudio realizado por la Universidad de Stanford en el que se evaluó el impacto de estar expuesto a 30 minutos diarios de quejas. Los resultados revelaron varios efectos negativos, como alteraciones en la química del cerebro, refuerzo de patrones negativos, interferencia en la resolución de problemas y daño en la actividad social. Además, las personas que se quejan de forma frecuente y excesiva pueden experimentar una disminución en la capacidad de experimentar satisfacción, ya que este comportamiento se relaciona con un enfoque constante en los aspectos negativos de la vida y una falta de atención hacia los aspectos positivos, lo que agota los recursos emocionales.

Asimismo, la Universidad de Stanford dio a conocer algunas recomendaciones para poder controlar el tiempo límite para las quejas, entre ellas tenemos:

La importancia de ser consciente cuando uno se encuentra rumiando y obsesionado con quejarse constantemente. Se enfatiza la necesidad de reconocer estos patrones de pensamiento negativo y la importancia de modificarlos. El primer paso es tomar conciencia de esta actitud y trabajar en cambiarla hacia un enfoque más positivo.

Resolver las cosas que están a nuestro alcance y que son prácticas o pequeñas en lugar de quejarse. El consejo principal es enfocarse en lo que se puede resolver y encontrar soluciones prácticas para los problemas, dejando de lado la actitud de queja. Se resalta la importancia de tomar medidas concretas y proactivas en lugar de lamentarse constantemente.

Evitar consumir malas noticias, tanto en periódicos como en noticieros. Se menciona que algunas personas se alimentan constantemente de esta información como una forma de justificar sus quejas. El consejo es evitar este tipo de contenido negativo y buscar fuentes de información más positivas y constructivas.

Pedir ayuda y hacer actividad física, en primer lugar, se destaca la importancia de buscar apoyo y contar con una red de contención, como amigos y familiares, para enfrentar estas situaciones. En algunos casos, puede ser necesario buscar la ayuda de un profesional de la salud mental. En segundo lugar, se resalta el beneficio de hacer ejercicio, ya que esto puede ayudar a mejorar el estado de ánimo y alejar pensamientos negativos.

Finalmente es importante no enfocarse únicamente en las cosas malas de la vida, sino también en las buenas, se resalta que exigir, señalar y quejarse son acciones fáciles, pero lo difícil es dar ejemplo y hacer las cosas.