En una acción coordinada entre el Ministerio Público, la Policía Nacional y la Municipalidad Provincial de Ica, se llevó a cabo un operativo exitoso para incautar varios kilogramos de carne que se comercializaban en condiciones poco higiénicas en espacios públicos. Además, se descubrió que los vendedores carecían de la documentación necesaria para respaldar el origen de los productos.
Situación de insalubridad
En la mañana de ayer, la Fiscalía, en colaboración con la Gerencia de Desarrollo Económico y Seguridad Ciudadana, la Gerencia de Protección del Medio Ambiente y Salubridad de la MPI, y la PNP, efectuaron una inspección en el mercado Arenales. Durante la revisión se constató que varios puestos no contaban con la documentación que respaldara la procedencia de la carne, y además se encontró que el alimento no cumplía con las condiciones adecuadas.
“La norma dice, si comercializo carne, tiene que proceder de un camal autorizado, y se debe tener la documentación, la libreta de control, pero no han mostrado nada. También hemos visto que están comercializando en la vía pública y eso está prohibido, porque tiene que hacerse en condiciones sanitarias, con un sistema de frio”, declaró Perseverando Calderón Bautista, responsable del área funcional de Salud Preventiva y Salubridad de la MPI.
“Durante una operación encabezada por el fiscal de prevención del delito, Julio Salas, se llevaron a cabo inspecciones en un rango de 15 a 20 establecimientos. En estas inspecciones se hizo hincapié en verificar tanto la procedencia como la calidad de los productos cárnicos, incluyendo aves, cerdos y reses. Además de esto, se efectuaron controles minuciosos en las balanzas utilizadas, con el fin de prevenir cualquier intento de fraude a los clientes. Lamentablemente, se encontró que algunas de estas balanzas estaban en condiciones antihigiénicas. Asimismo, se observó la venta de carne en la vía pública en las cercanías del mercado, lo que llevó a la realización de operativos de decomiso.
“Buscamos prevenir el tráfico de alimentos, hemos inspeccionado los puestos de venta para corroborar cual es la procedencia de las carnes y si son aptos o no para el consumo humano. El municipio ha decomisado carnes que eran comercializadas en la calle, las balanzas estaban en condiciones insalubres, por eso algunos puestos fueron cerrados y se tiene antecedentes sobre el mismo tema”, explicó, y agregó que en el centro de abastos existe un alto nivel de desorden, ya que los comerciantes no respetan los límites de sus puestos de venta y utilizan espacios inadecuados para almacenes.
