EE.UU. se esfuerza en calmar a sus aliados “frustrados” por la filtración de documentos clasificados

Sabrina Singh, la vicesecretaria de prensa del Departamento de Defensa, ofrece una rueda de prensa en Arlington, el 26 de enero de 2023.

Los representantes gubernamentales de países europeos y hasta de Oriente Medio le preguntaron a Washington cómo se había filtrado, quién era el responsable y cómo iba a retirarla de la Red.

Los altos funcionarios norteamericanos se apresuran a calmar a sus aliados “confusos y frustados” por la filtración de documentos clasificados sobre el conflicto ucraniano y otros asuntos sensibles, informa Politico citando varias fuentes gubernamentales de distintos países.

Asimismo,se dió a conocer la filtración de los documentos en la Red la semana pasada, altos cargos de los servicios secretos, el Departamento de Estado y el Pentágono contactaron a sus homólogos con el fin de sosegar la preocupación causada por las noticias, confirman los cuatro funcionarios ,uno estadounidense, dos europeos y un miembro de la alianza internacional de inteligencia Cinco Ojos, familiarizados con esas conversaciones.

Una de las fuentes mencionó que miembros de Cinco Ojos, compuesta por EE.UU., Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda, habían pedido información a Washington sobre el asunto, pero que todavía estaban a la espera de una respuesta.

Las portavoces gubernamentales del Reino Unido, Bélgica, Alemania, los Emiratos Árabes Unidos y Ucrania le preguntaron a EE.UU. cómo se había filtrado información secreta en la Red, quién era el responsable, cómo Washington iba a retirarla del acceso libre en redes sociales e impedir incidentes semejantes en el futuro.

Washington por su parte aseguró a sus aliados que estaban investigando la situación y tratando de entender el alcance de la filtración, según han afirmado las fuentes europeas.

“El Departamento de Defensa sigue revisando y evaluando la validez de los documentos fotografiados que circulan en las redes y que parecen contener material sensible y altamente clasificado”, indicó el domingo vicesecretaria de prensa del Departamento de Defensa, Sabrina Singh. Asimismo, confirmó que las agencias pertinentes ya se habían puesto en contacto con sus aliados y socios con respecto a la filtración y que habían informado a los comités pertinentes del Congreso.

Por lo tanto, Ucrania habría cambiado algunos de sus planes militares después de la filtración de documentos clasificados del Pentágono relacionados, entre otros asuntos, con el actual conflicto bélico y con una posible contraofensiva de Kiev, reportó CNN al citar a una fuente cercana al presidente ucraniano Vladímir Zelenski.

Esa misma cadena informó el domingo, luego de revisar los documentos filtrados, que EE.UU. espiaba al mandatario ucraniano.

¿De qué van los documentos?
Los materiales destapados, presuntamente elaborados por el Pentágono y las agencias especiales de EE.UU. en febrero y marzo, se focalizan en cuestiones como las pérdidas aproximadas de Ucrania y Rusia desde el inicio del conflicto, las armas y los equipos que Kiev necesitaría en el futuro, el calendario de entregas por parte de Washington y la OTAN, el número de efectivos y el material bélico en diferentes frentes, las capacidades de la defensa antiaérea ucraniana, así como el desarrollo del conflicto en general.

También salen a la luz detalles como el espionaje de Washington a Corea del Sur e Israel, vías para que este último termine por enviar ayuda letal a Ucrania y los posibles escenarios de la conducta política de China, entre otros.

The Washington Post señala que el alcance total de la filtración no está claro. Las 50 páginas revisadas por el periódico involucraron “casi todos los rincones del aparato de inteligencia estadounidense”.

Varios funcionarios estadounidenses revelaron al medio mencionado que altos cargos del Pentágono habían restringido este viernes el flujo de información en respuesta a las docenas de filtraciones. Una de las fuentes describió la medida como “inusualmente estricta” y dijo que pone en evidencia el “alto nivel de pánico” entre la cúpula de la institución.