El estudio realizado por especialistas en nutrición en Hangzhou, China, sugiere que la ingesta de papas fritas y otros alimentos fritos podría estar relacionada con problemas de salud mental, como la depresión y la ansiedad. Aunque los alimentos fritos son un deleite para el paladar de muchas personas, el estudio encontró una posible correlación entre su consumo y el deterioro de la salud mental.
Aquel estudio realizado durante 11,3 años y que evaluó a 140.728 personas encontró que comer frituras, especialmente papas fritas, estaba relacionado con un aumento del 12% en el riesgo de ansiedad y un 7% más de riesgo de depresión en comparación con las personas que no comían estos alimentos.
Después de descartar a las personas que ya padecían ansiedad o depresión mediante diagnóstico, se encontraron 8.294 casos de ansiedad y 12.735 casos de depresión en la muestra de 140.728 personas evaluadas durante 11,3 años. Los resultados del estudio también mostraron que las papas fritas aumentaron el riesgo de contraer depresión en un 2% en comparación con la carne blanca frita.
El estudio, publicado en PNAS el 24 de abril, sugiere que limitar el consumo de alimentos fritos puede ser beneficioso para la salud mental. Aunque los resultados son preliminares, los investigadores encontraron una asociación entre el consumo de alimentos fritos, especialmente las papas fritas, y un mayor riesgo de ansiedad y depresión. Sin embargo, los autores señalaron que no está claro si los alimentos fritos causan problemas de salud mental o si las personas con estos síntomas tienen más probabilidades de recurrir a ellos.
Finalmente, esta investigación nos informa la importancia del consumo excesivo de frituras, alimento diario de un porcentaje de la población peruana.
