Un equipo de investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de Chota en colaboración estratégica con el Instituto de Innovación Agraria y la Universidad Nacional de Jaén, se unieron para enriquecer las propiedades de la variedad del maíz morado INIA 601, descubierta 4 años antes.
El logro fue posible gracias al proyecto titulado “Impacto de la bioestimulación magnética de semillas de maíz morado (Zea mays L) INIA 601 en la producción y concentración de compuestos bioactivos en la región de Cajamarca”, el cual recibió financiamiento de ProCiencia.
“Hemos elegido la semilla del maíz morado INIA 601 porque tiene las mejores características en compuestos bioactivos, es decir, componentes orgánicos que poseen beneficios para la salud de las personas cuando las consumen”, explicó Tony Steven Chuquizuta Trigoso, investigador principal del proyecto en la Universidad Nacional Autónoma de Chota.
El objetivo de la investigación fue evaluar el efecto de la bioestimulación magnética en las semillas de maíz morado en cuanto a germinación, rendimiento de producción y concentración de compuestos bioactivos en la región.
Chuquizuta destacó que estos compuestos bioactivos, principalmente antocianinas y polifenoles, poseen propiedades antioxidantes que retardan el envejecimiento celular, previenen enfermedades como el cáncer y problemas cardiovasculares, reducen el estrés y fortalecen las defensas del cuerpo contra agentes dañinos.
Además, como aspecto novedoso, se identificó Procianidina B2 y resveratrol entre los 14 polifenoles analizados. La primera protege las células contra los radicales libres y combate la calvicie, mientras que el resveratrol tiene propiedades antiinflamatorias y puede reducir el colesterol y los niveles de azúcar en sangre.
“Esto permitiría decir que el grano del maíz morado INIA 601 tiene tantos polifenoles que puede ser usado por la industria farmacéutica y alimentaria, además sería ventajoso para que, en el mediano plazo, el agricultor venda a mejores precios la harina de panca y coronta de esta variedad”, señaló Chuquizuta.
Los germinadores magnéticos
Para llevar a cabo el proyecto, se diseñaron y construyeron dos tipos de germinadores magnéticos: estático y pulsado. Las pruebas se realizaron en parcelas demostrativas en la estación experimental INIA en Cochamarca y Cajabamba, incluyendo un grupo de control.
El equipo de investigación, liderado por Chuquizuta, contó con la colaboración de la magister Alicia Medina Hoyos del INIA Cajamarca, precursora de la variedad de maíz morado INIA 601, y del Dr. Hubert Arteaga Miñano de la Universidad Nacional de Jaén, quien desarrolló prototipos de generadores de campos magnéticos para la bioestimulación de semillas de maíz morado.
Actualmente, Cajamarca es el principal productor de la variedad de maíz morado INIA 601 en el Perú, gracias a su adaptación y altitud óptima para su crecimiento, que oscila entre los 900 y 2400 metros sobre el nivel del mar. Este tipo de maíz presenta características superiores en comparación con otras variedades, ya que sus beneficios nutracéuticos se encuentran no solo en los granos, sino también en la panca y la tusa, y puede cultivarse en el centro y sur del país.
Se han desarrollado dos prototipos de bajo costo para la bioestimulación magnética de semillas de maíz morado, aunque la tecnología no se comercializará hasta su patentamiento. El proyecto, financiado con 100,000 soles a través de la convocatoria ProCiencia del Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica (Concytec) 2020 – 2, se inició el 23 de diciembre de 2020 y finalizó el 12 de enero de 2024.
