La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), junto con el Reino de los Países Bajos, serían los anfitriones y habían prevista celebrar la Conferencia Mundial sobre la Libertad de Prensa entre los días 22 al 24 de abril, en el Foro Mundial de La Haya.
Sin embargo, dadas las circunstancias y el brote del COVID-19, la conferencia ha sido programada para el 18 al 20 de octubre en el mismo lugar, el evento seria conjunta entre el Día Mundial de la Libertad de Prensa y el Día Internacional para poner fin a la impunidad de los crímenes contra los periodistas que se celebrará el 02 de noviembre.
Esta fecha coincide con el aniversario de la Declaración de Windhoek, en el cual se elaboró un documento donde se recogían los principios de la libertad de prensa, realizado por representantes de los medios de comunicación africano que participaban en un seminario organizado por la UNESCO, en la capital de Namibia.
El mismo establece en el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la libertad de expresión es un derecho fundamental. “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”.
La ONU finalizó, “teniendo en cuenta ese derecho, el Día Mundial de la Libertad de Prensa es una oportunidad para recordar a los gobiernos que es necesario respetar la libertad de expresión y para concienciar sobre los problemas de la libertad de prensa y la ética profesional”.
M.L.D.D
