Me llamo Henry, tengo 22 años y ahora mismo estoy frente al espejo decidiendo si debo ir a mi primera cita con una camisa blanca o negra, algunos creen que ser varón es fácil, que nos ponemos lo primero que encontramos, ¡pues, no!, ustedes señoritas, no son las únicas que se ponen nerviosas antes de salir con la persona que les gusta, nosotros los hombres también sufrimos cuando lo que elegimos no nos queda bien. Mido 1.70, soy atractivo, al menos eso dicen las chicas con las que suelo salir, aunque en lo personal, no me considero tan guapo, no significa que no me gusta mi aspecto, es algo que tiene que ver con nosotros los varones, somos muy inseguros respecto a nuestro cuerpo. Me gusta la literatura, espero ser un gran escritor a la altura de Vargas Llosa o Bécquer, sé que muchos usan eso del romanticismo para conquistar chicas, yo no, al contrario, me avergüenza un poco admitir que soy un soñador.
Pero no nos desviemos, hoy iré a un concierto Katy una amiga de mi hermana a la que me llevo meses convencer que yo era un “buen partido” en realidad yo también le gusto, pero Tania -mi linda hermana- me explicó que las mujeres tienen que hacerse de rogar, es una “ley femenina” que yo nunca entenderé, sobre todo porque para mí nunca fue problema ligar con alguien, usualmente son las chicas las que me buscan y yo el que se hace el difícil.
Me interesa Katy por todo lo que representa una mujer independiente que no depende de mí género -o eso escucho que conversa con Tania cada que nos visita, bueno, la visita-, en su cuenta de Facebook escribe mucho sobre feminismo y lo injusto que le parece que consideren a las mujeres el sexo débil, además defiende el hecho de que los hombres también sufrimos por culpa del machismo ¡me enamoré de ella irrevocablemente!, de acuerdo, lo último es falso, pero me gustan las mujeres que son difíciles de intimidar, una chica que más que un reto, sea real, me gusta Katy, no lo negare, es bastante sexy, un cuerpo que seguro muchas envidian y una carita de porcelana, pero más que eso, es segura de sí misma, seguro que a diferencia mía ella no sufre por que ponerse o si esto o tal le queda bien, apuesto a que ni siquiera está nerviosa como yo.
Espero cerca de 30 min a que baje de su departamento, esta preciosa, usa jeans tacos bajos y una blusa blanca que deja al descubierto sus bellos hombros. No es muy original, ni lo más recomendable, pero antes del concierto iremos al cine, le pregunte que le gustaría ver y para sorpresa mía, eligió una comedia romántica, digo sorpresa, porque pensé que no le iba mucho ese género, a mí no me va mucho, en películas, prefiero más el terror, acción o thrillers, pero de todos modos decido darle una oportunidad. Le pregunto si prefiere pagar las entradas o comprar las palomitas, me mira sorprendida, creo que la cague, ¡diablos, mala forma de empezar!, intentó relajar el ambiente citando una de sus frases de Facebook, “la igualdad es como la gravedad, una necesidad”, creo que es de Joss Whedon un guionista estadounidense.
Sonríe de forma coqueta y hace como que no escucho, creo que no tiene idea de que hablo, al final decido pagar todo yo. Esto es muy incómodo, apenas me recibe la entrada y pasa por mi lado sin decir nada, ni siquiera puedo disfrutar la película, ella ni siquiera me mira, agradezco cuando por fin termina, Katy sigue indispuesta, parece demasiado incomoda conmigo, voy a pedir el taxi para ir al concierto, pero me dice que no, que no se siente bien y prefiere ir a casa, esto no era lo que esperaba.
- Pero, ¿te volviste loco?- es el saludo de mi hermana cuando entro a casa. Estoy confundido, intento explicar lo que paso, pero ya Katy la había llamado y Tania a su manera vuelve a explicarme que en la primera cita, debo demostrar que soy un “caballero”.
Subo a mi habitación y me tumbo en la cama, mi hermana tal vez tenga razón, debí haber sido más sutil, más “educado”, sin embargo no puedo evitar sentirme molesto, sobre todo por lo que esperaba de ella, no me gusto para nada que me ignorara el resto de nuestra cita, no debía terminar así, se supone que iríamos al concierto de Sabina, me demore mucho en conseguir buenas entradas, tal vez le robaría un beso y tomaría su mano, se supone que esta salida iba a ser un gran inicio para ambos, no puedo entender como algo tan absurdo pudo arruinar mi noche
(Fin I parte) by @natruch
