Comunidades del río Putumayo buscan cuidar sus peces y al parque Yaguas en plena pandemia.

Los habitantes de la parte baja del río Putumayo están comprometidos con la preservación de la biodiversidad a pesar de la inestabilidad económica y buscan soluciones para no quedarse sin ingresos.

(Tres Esquinas: Hombres y mujeres transportan las cajas con alevinos hacia las embarcaciones)
Hombres y mujeres transportan las cajas con alevinos hacia las embarcaciones

Dagoberto Patricio, miembro de la Asociación APPA Los Cocodrilos, junto con otros 14 miembros, se dieron cuenta que la rentabilidad de los alevinos (peces pequeños que son utilizados para repoblar estanques y ríos) es más beneficiosas y preciados en el mercado asiático donde, además, se les conoce como pez dragón.

Los guardaparques del Parque Nacional Yaguas, trabajan de la mano con la jefatura para lograr la sostenibilidad del bajo Putumayo mediante la crianza de arahuanas y así mantener los ingresos estables con el mercado de Asia; pero su preocupación es la sostenibilidad del proyecto en plena crisis sanitaria que vive el país, sin mencionar la crisis económica que estamos atravesando. “Antes de la pandemia, hemos recibido un presupuesto a través del parque, el cual hemos usado para comprar gasolina, algo de comida, jabón y otras cosas”, explica Fernando Alvarado, presidente de la Federación de Comunidades Indígenas del Bajo Putumayo (Fecoibap). “Nos lo hemos repartido, pero con el compromiso de todos de devolver el dinero cuando termine la pandemia y vendamos las crías de arahuana. Con lo que devolvamos, compraremos las cosas que necesitemos en ese momento, y así cada año. La idea es no dejar morir ese presupuesto”, señaló.

E.J.L.T.