El adjunto para la prevención de conflictos sociales de la Defensoría del Pueblo, Rolando Luque, manifestó que la Policía Nacional del Perú (PNP) no es la encargada de resolver los conflictos sino de mantener el orden público, y que está en las manos de las autoridades del gobierno recuperar la tranquilidad.
El representante de la Defensoría pidió distinguir cada uno de los casos de las muertes en protestas. “Esas afirmaciones muy generales no sirven y evitan comprender la complejidad de esta situación”, aseveró.
“En algunos casos la PNP ha actuado correctamente y en otros hay dudas sobre su actuación, y por consiguiente se tiene que investigar. No excluyamos a nadie de la responsabilidad porque necesitamos una Policía que actúe limpiamente. La moral alta de la Policía no puede provenir del encubrimiento, sino de la legalidad”, agregó.