Hay acciones y momentos que pueden cambiar el curso de nuestra historia en todo sentido. Si hablamos específicamente de salud, es sabido que algunos hábitos cotidianos influyen notoriamente en nuestro organismo para bien, o para mal.
En ese sentido, recientemente, un estudio científico realizado por expertos de la Universidad de Colorado en Boulder (CU Boulder), Estados Unidos, postuló que la jardinería puede tener un impacto positivo y significativo en la salud mental y en la prevención del cáncer.
Una de las autoras del trabajo, Jill Litt, quien es profesora del Departamento de Estudios Ambientales de CU Boulder, destacó que estos hallazgos “proporcionan evidencia concreta de que la jardinería comunitaria podría desempeñar un papel importante en la prevención del cáncer, las enfermedades crónicas y los trastornos de salud mental“. Tal como mencionó la experta, si esta actividad al aire libre es realizada en grupo, puede ser aun más saludable.
Para llegar a estos resultados, los expertos estadounidenses estudiaron a 493 personas adultas que estaban en las listas de espera para participar en jardines comunitarios de las regiones de Denver y de Aurora. Ninguna de ellas había asistido antes a esta clase de espacios. Una vez que comenzaron las tareas de cuidado de plantas y de huertas, encontraron que los participantes comieron más fibra e hicieron más actividad física, dos de las formas más conocidas de reducir el riesgo de cáncer y las enfermedades crónicas. En segundo lugar, los autores observaron disminuciones significativas en el estrés y en la ansiedad.