Uso facultativo de mascarillas: ¿Qué es el síndrome de la cara vacía?

Uso facultativo de mascarillas: ¿Qué es el síndrome de la cara vacía?. Foto. El Peródico.

Este síndrome afecta principalmente a adolescentes que se encuentran en una etapa de cambio personal y físico.

Desde el 1 de mayo, el gobierno dispuso el uso opcional de las mascarillas en espacios abiertos, mientras que para algunas personas ha sido una gran noticia para otras ha sido perder la protección que han llevado durante dos largos años.

Sin duda alguna, las mascarillas se convirtieron en un accesorio de primer uso para prevenir los contagios por coronavirus en todo el mundo. Eran imprescindible para transportarse, ir al trabajo, ir a espacios públicos y privados, entre otros, mientras se avanzaba con la vacunación, el virus iba cediendo y con ello las medidas de protección.

Al respecto, existen personas que refieren seguir usando mascarillas por factores más allá de la seguridad sanitaria, lo cual es denominada Síndrome de la cara vacía. Claudia Tassara, psicoterapeuta y neuro educadora, habló con el grupo El Comercio, y explicó que es el Síndrome de la cara vacía y que apareció por el uso de la mascarilla debido a la pandemia del nuevo coronavirus.

¿Qué es el Síndrome de la cara lavada?

Se le llama el síndrome de la cara vacía a una fobia o miedo que se caracteriza por la sensación de inseguridad que se genera en la persona al dejar al descubierto el rostro, en este caso, por dejar de usar mascarillas.

Este problema, también conocido como mask fishing, puede tener dos orígenes diferentes: el miedo a mostrarse a los demás y la fobia a contagiarse. Y es que la mascarilla, al cubrir la mitad del rostro oculta ciertas imperfecciones, como acné, arrugas, lunares, vello facial, brackets y hasta falta de dientes, por ejemplo. El cambio con y sin este objeto de protección personal, en algunos casos puede ser abismal.

Es por ello que, más allá de una cuestión sanitaria, algunas personas prefieren seguir usándola.

¿A quiénes afecta el síndrome de la cara vacía?

El síndrome de la cara vacía afecta, sobre todo, a los adolescentes, ya que están en una etapa de crecimiento personal y físico, aspecto en el que sufren muchos cambios. Estar sin el cubrebocas, los puede hacer sentir inseguros.

“Hay algunos colectivos que tienen miedo a quitarse las mascarillas. Ese temor, muchas veces se convierte en pavor obsesivo y descontrolado al contagio, que puede pasar tanto en la población adulta como en jóvenes”, afirma Celia Sánchez Rodríguez, psicóloga y orientadora educativa al medio español Salamanca24horas.

Asimismo, El síndrome de la cara vacía se acentúa en adolescentes con baja autoestima, complejos físicos, dificultades de sociabilización y de transmitir y o gestionar sus emociones.

¿Qué hacer si sufro este síndrome?

Claudia Tassara recordó que, si el miembro de la familia no supera este síndrome, lo mejor será buscar un especialista e iniciar un tratamiento. Sin embargo, hay acciones que podemos aplicar en casa como:

  • Hacer una lista de situaciones que te hacen sentir incómoda. Puedes organizar la lista de mayor incomodidad a menor incomodidad.
  • Conocer qué pensamientos tienes ante las situaciones incomodas. Muchas personas se dejan llevar por los pensamientos que pueden generar. Por ejemplo, la ansiedad genera pensamientos abrumadores, precisa.
  • Identificar cuáles de esos pensamientos son irracionales, son aquellos pensamientos que te están generando ansiedad y emociones que no te ayudan a seguir con normalidad.
  • Proponer por cada situación incómoda alguna opción de solución.

¿Cómo adaptarse a los cambios?

La psicoterapeuta señaló que durante la pandemia hemos tomado una conducta de protección y la hemos extendido a una protección psicológica. Es decir, que el cubrebocas es una protección psicológica, una barrera que no ha ayudado de cierta forma a seguir.

“¿Qué nos hace adecuarnos a los cambios? El trabajar la resiliencia, sacar lo mejor de una situación, poder afrontar experiencias adversas y no ver las cosas de manera negativa. Todos los cambios tienen su tiempo para aceptarlas y esto dependerá de las características de las personas. Así como nos adaptamos al uso de mascarillas, debemos adaptarnos a dejarlas de usar”, recomendó la especialista.

K.E.T