La bancada parlamentaria Frente Amplio ha planteado la creación de un impuesto que ascendería al 10% sobre la venta de productos que tengan como insumo principal en su fabricación el agua como lo son el agua embotellada, agua gasificada, bebidas rehidratantes o energizantes, té bebible, gaseosas, jugos y productos lácteos como la leche en polvo.
Esta medida tiene como finalidad constituir un fondo económico que permita trabajar medidas para hacer frente a la escasez de agua en el Perú.
El monto que pagan las empresas por el agua que utilizan en la fabricación de sus productos apenas llegan a los 0.0001 céntimos de sol por litro por lo que la iniciativa no estaría en contra de la industria o los empresarios, afirmó el congresista Horacio Zeballos Patrón.
Se estima que el pago de las empresas llegaría entre 400 a 700 millones de soles anuales, los que serán dirigidos a lograr un afianzamiento hídrico en las cabeceras de cuencas, crear los Consejos de Recursos Hídricos de Cuenca en las regiones que carecen de este recurso y por último se destinará el 2% del fondo a la investigación científica a cargo de Concytec.
La propuesta ha sido enviada a la Dirección de Inversiones Agrarias del Ministerio de Agricultura para su evaluación, aunque aún no hay diálogo con el gremio de empresarios. En el Perú existen alrededor de 13 empresas productoras de bebidas en el país.
J.R.M
