Las autoridades, alertadas por un grupo de albañiles, encontraron una fosa clandestina con 11 cadáveres este domingo en el estado mexicano de Michoacán. Los cuerpos presentaban signos de haber sido torturados. Este delito estaría atribuida a narcotraficantes, según la Fiscalía estatal.
“Durante las labores que hasta el momento se han realizado en la zona, se localizaron 11 cadáveres en estado de descomposición, mismos que fueron trasladados al Servicio Médico Forense, en apego a los protocolos, para que se practique la necropsia de ley”, indicoó la Fiscalía en un documento.
La Fiscalía General del Estado (FGE) señaló a EFE que unos trabajadores encontraron unas bolsas negras que contenían restos humanos, mientras realizaban excavaciones. Se desconoce las identidades y el sexo de los cuerpos.
La teoría que maneja la Fiscalía estatal es que este hecho tendría que ver con la disputa que existe entre los carteles de narcotráfico Jalisco Nueva Generación y Nueva Familia Michoacana, quien controla la producción y narcotráfico de metanfetamina.
D.P.G.
