La lideresa de Fuerza Popular volvió a comparecer este miércoles ante el juez Richard Carhuancho, quien sorpresivamente decidió anticiparse a la lectura del fallo sobre el pedido de prisión preventiva por 36 meses de Keiko Fujimori, lo cual tomó por sorpresa a la fiscalía y a la defensa.
El fiscal José Domingo Pérez culpa a Fujimori y su círculo más cercano de conformar una organización criminal dentro de su partido político, por presuntamente haber recibido una suma fuerte de dinero de la empresa Odebrecht y por encubrir con falsos aportantes durante la campaña de 2011.
Cabe resaltar que al fiscal le falta argumentar el pedido de prisión preventiva contra cinco imputados, entre los más importantes estarían el exministro de Transportes y Comunicaciones Augusto Bedoya.
“Es importante señalar que esto es un diálogo privado, y creo que es evidente que es un chat de coordinación política. No tiene nada que ver con el aspecto legal”, expresó Keiko Fujimori.
Las conversaciones publicadas pertenecen a un chat que mantendría Keiko Fujimori junto a Pier Figari y Ana Herz, sus dos asesores más cercanos y un conjunto de quince congresistas. Estos se encargarían de dirigir al resto de parlamentarios.
En esas conversaciones se tendría conocimiento de que Keiko Fujimori junto a Pier Figari poseían el control absoluto de los 62 congresistas fujimoristas. En otro fragmento, la congresista Alejandra Aramayo reconoce haber blindado al exjuez César Hinostroza.
Finalmente, estos mensajes encontrados en una aplicación de mensajería instantánea, han sido utilizados por el fiscal José Domingo Pérez para probar el grado de control de la organización criminal dentro de Fuerza Popular y que deberían ingresar a prisión preventiva por el riesgo de impedimento de la investigación.
M.L.T.
