Ya se siente la emoción. La llama tricolor (azul, roja y verde) del movimiento paralímpico irradia ya su luz desde este martes en el Estadio Nacional de la capital japonesa.
“Declaro abiertos los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020”, expresó el emperador de Japón, Naruhito.
Los primeros en desfilar fueron los seis miembros del equipo de refugiados. El nadador afgano Abbas Karimi, acogido en Estados Unidos; el taekwondista de Burundi Parfait Hakizimana, quien vive en Ruanda; el lanzador de disco iraní Shahrad Nasajpour, con residencia en territorio estadounidense; y los tres deportistas sirios: el nadador Ibrahim Al Hussein, con residencia en Grecia; la lanzadora Alia Issa, quien habita en Grecia; y el piragüista Anas Al Khalifa, quien reside en Alemania.
Hasta que llegó la hora de los peruanos Angélica Espinoza, representante de Para taekwondo, y Efraín Sotacuro, figura del Para atletismo, quienes fueron los abanderados del país en la Ceremonia Inaugural de los Juegos Paralímpicos Tokio 2020.
“No alcanzo a creerme que al fin estamos aquí”, declaró el presidente del Comité Paralímpico Internacional Andrew Parsons.
Japón cuenta con la delegación más numerosa, 254 deportistas. Y se celebra por segunda ocasión estos juegos en Tokio, ya que la primera fue en 1964.
Hasta el 5 de septiembre participarán 4.510 deportistas de 162 países que lucharán por obtener alguna medalla en las 529 competiciones de los 22 deportes del programa paralímpico.
El diseño de la presea expresa el espíritu festivo de los Juegos, ya que representa un viento nuevo y fresco que sopla alrededor del mundo y busca la unidad en la diversidad.
“Estoy muy agradecida de poder participar en estos juegos históricos como diseñadora. Quería mantener a los atletas al frente y al centro mientras concebía este diseño. Espero que estas medallas acerquen a los atletas y a las personas que los rodean y provoquen una nueva brisa fresca en sus corazones “, manifestó la diseñadora de las medallas, Sakiko Matsumoto.
