La Segunda Sala Penal de Apelaciones de Cusco, presidida por Pedro Álvarez, ratificó la sentencia a cadena perpetua a Braulio Contreras Quiñones (58) por el delito de violación sexual en agravio de dos menores de edad.
Los hechos datan del año 2018, cuando el comerciante trabajaba en la feria “Sábado Baratillo”, del distrito de Santiago, lugar donde las madres de las menores S.B.CH.Q. (09) y M.V.V.Q. (04) también tenían su puesto de ventas. Según la tesis fiscal el violador fue ganándose la confianza de las progenitoras, ofreciéndose a cuidar de sus hijas, llevándolas a comer y comprándoles diferentes objetos y prendas de vestir.
De acuerdo a la acusación, el sentenciado ultrajó a las menores en varias oportunidades, registrando este aberrante hecho en su cámara fotográfica, lo cual fue homologado, determinando que las imágenes corresponde al acusado. Este material audiovisual fue proporcionado por una tercera persona.
Además de estas niñas, más material que compromete al sujeto en otras violaciones fue hallado en su cámara, por lo que no se descarta que se trate de un violador en serie.
“Considerando que los padres de familia son los primeros responsables de la prevención de la violencia sexual contra la niñez; reitera su llamado de alerta, y exhorta a prestar mayor atención en el cuidado de sus hijos como una medida de prevención y responsabilidad; ya que la mayoría de los casos ocurren en la casa con miembros de la familia, amigos y personas cercanas en las que nuestros hijos e hijas confían”, citaron desde la Corte Superior de Justicia de Cusco.
S.F.M.S.
