El Congreso de Chile aprobó la ley que permite a las personas transgénero poder cambiar su nombre y sexo en sus documentos de identificación, siendo solo válida para las personas mayores de 18 años y quienes sean menores de edad tendrán que contar con una autorización de sus padres o tutores legales; sin embargo, los menores de 14 años quedaron fuera de la ley.
Hernán Larraín, el ministro de justicia, especificó que la decisión de adicionar el permiso de un tutor para los adolescentes que deseen cambiar su nombre y sexo era fundamental ya que de esta manera se les “resguarda y protege”. En otro de los casos, quienes están casados podrán acudir ante un tribunal familiar, mientras las personas solteras, podrán hacerlo en el registro civil.
Luego de haber sido presentado durante el primer gobierno de Sebastián Piñera, este proyecto recibió la máxima atención a finales del gobierno de Michelle Bachelet, tras el alcance mundial de la película chilena “Una mujer fantástica”, interpretada por la actriz tansgénero, Daniela Vega.
La película ganadora al Oscar como Mejor Película Extranjera expone el racismo, desprecio y maltratos que tiene que pasar la protagonista. “Los transexuales somos seres marginales, Se sufre mucho en la transición y ese dolor nos hace más fuertes”, acotó.
La ley debe ser sancionada por el presidente, Sebastián Piñera, aunque todavía puede enfrentar algunos obstáculos ya que legisladores conservadores no descartan impugnarla ante el Tribunal Constitucional. De ser aprobada, el poder judicial tendrá seis meses para reglamentarla y cuatro meses más para que entre en vigor.
C.M.A
