Caso Banchero: Monterrico no es Comas, por Jose Briceño Abanto

¨Un mismo grupo de delincuentes han asaltado 4 veces un mismo chifa en los últimos cuatro meses, así lo denunció el dueño del local, ubicado en Pachacamac, Villa El Salvador. El restaurante de comida ‘El Chino’, según contó su propietario, ha sido el blanco de los malhechores en diciembre del año pasado, dos veces en abril y la última, el 5 de mayo. Así consignó el diario Perú 21 en su edición del 8 de mayo¨.

¨Una modesta cevichería en San Martín de Porres es tal vez donde se han registrado más robos en todo Lima, al menos cuarenta veces. Los amigos de lo ajeno han dejado su huella entre trabajadores y comensales. Un video de uno de los últimos atracos comienza cuando dos sujetos con gorra irrumpen en el negocio algunos clientes intentan cuidar sus pertenencias, pero son amenazados. La pesca fue rápida esta vez, aunque matón que se respeta no se va sin antes romper una botella en las rejas, las mismas que en más de una oportunidad, como recuerda la propietaria, no han servido de mucho a la hora de evitar los robos, como aquella vez en que ni con ayuda de varias meseras pudo superar la fuerza del ladrón. Según información de américa tv.com. del pasado mes de abril¨.

¨Dos asaltos sufrió el restaurante ¨El Buen Sabor¨ en la cuadra 15 de la avenida. Ese local fue atacado dos veces entre el sábado y el domingo pasado; un casino ubicado al frente también fue víctima de los mismos delincuentes, y un chifa en la cuadra 16 fue visitado por la misma organización criminal. Informó el ¨Diario Uno¨ en su edición del 26 de abril¨.

¿Qué diferencia hay entre esos negocios varias veces asaltados por las mismas bandas, y el atraco a la Casa Banchero en el Jockey Club del Perú?

Pues que a pesar que muchos negocios han sido atacados en más de una oportunidad y por los mismos hampones, estos no han recibido la atención mediática que si tuvo la prestigiosa joyería ubicada en el jockey. Tan solo se consignó por parte de los medios de comunicación la información al momento de sucedido los hechos, y después: ¨a otra cosa mariposa¨. Ni para los sistemas informativos limeños, y al parecer tampoco para las autoridades la identificación y captura de los criminales tras esas gigantes olas de asaltos continuos y constantes merecen mayor esfuerzo, como si lo ameritó el caso Banchero.

Veamos, el asalto se perpetro el pasado 22 de junio, causando como es de comprender la atención y alarma por parte de la población; los medios de comunicación hicieron amplios despliegues de reporteros y equipos para llevarnos las imágenes y testimonios de los perjudicados en ese caso, apenas sucedido el hecho. Y resulta que hasta ayer domingo 08 de julio por la noche, después de 16 días este tema se seguía ventilando en nuestra televisión, es que el Jockey Club y Banchero pesan, los chifas, cabinas de internet, farmacias etc. que fueron asaltadas muchas veces por los mismos criminales no. Una cosa es que atraquen un negocio en Monterrico, y en el centro comercial más ficho de la capital, otra muy distinta es que lo hagan en Carabayllo o Villa el salvador. ¿Diferencias de clase o color de piel?

Casi a diario somos testigos de entrevistas y declaraciones de autoridades policiales, sobre las pesquisas que se vienen llevando a cabo por este mediático tema. Altos oficiales de la PNP. y especialistas en investigación criminal nos explican de los esfuerzos que se llevan a cabo, por poner tras las rejas a esos criminales, lo cual está muy bien, recordemos que ella es la función que la sociedad les ha encomendado, solo creemos que igual despliegue y esfuerzo se debe realizar cuando se asalte sistemáticamente en zonas que no sean ni el Jockey Club, ni Monterrico.

Solo pedimos que los negocios asaltados en distritos emprendedores de nuestra capital tengan el mismo amparo por parte de la policía especializada en criminalística, que el que tiene hasta el momento la casa Banchero, y que los medios de comunicación, es decir las televisoras locales, se ocupen aunque sea en más de una oportunidad de los múltiples asaltos a los mismos negocios, y que difundiendo los videos de cámaras de seguridad de los chifas, salones de belleza, bodegas, barberías etc. atacados, ayuden a identificar y detener a quienes aterran a nuestra población. Igual obligación hay para nuestras autoridades tanto para Monterrico como para Comas.  Igual atención de los medios debería haber para la Casa Banchero, como para un chifa asaltado varias veces en Collique.

José Briceño Abanto.