Costa Rica apretó y fue un rival justo conforme recuperaba confianza y no debemos olvidar que veníamos de una racha de derrotas y con este triunfo sumamos apenas la tercera victoria post Mundial.
Esta selección no jugó como en las eliminatorias pasadas o como en el mundial. Ha perdido precisión e intensidad de juego y la muestra de esto es la actuación de Canchita Gonzales quien fue el mejor de la cancha y no estuvo en el proceso anterior.
Nadie puede discutir el esfuerzo de los jugadores con la selección; se matan. Pero hay algo que preocupa, seguimos dependiendo de Paolo Guerrero, quien entró en el complemento y cambió el destino del partido.
Con Guerrero en cancha es notoria una sensación de motivación para los jugadores, con él mejoró Cueva, Ruidíaz, Carrillo, Tapia en el despliegue y Gonzales de ida y vuelta. Inclusive el gol de Aladino viene por ese plus, aunque este se dio cuando Paolo estaba curándose una herida en la cabeza.
Lo bueno de este partido ante Costa Rica es la variante que utilizó Gareca, hizo hasta tres cambios de sistema 4-2-3-1, 4-4-2 y terminó con un 3-5-2. Y hasta utilizó 15 jugadores. Lo que faltaría ajustar, es la velocidad de juego y el pase filtrado.
Ahora, ¿Qué pasará ante Colombia? Seguro se irá mejorando en la intensidad de juego y es posible que como defensas centrales arranquen Zambrano y Santamaría. Por otro lado, Farfán ya superó su lesión y podría arrancar desde el inicio ante los cafeteros, todo depende del Profe.
G.S.V.
