Borrell: El conflicto en Ucrania unió a Occidente, pero expuso las diferencias con otros países

Josep Borrell ha reflexionado sobre los cambios transformadores que han barrido la UE desde que el Kremlin lanzó la invasión de Ucrania.

Foto: El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.

El conflicto entre Rusia y Ucrania ha unido a los países occidentales, al tiempo que ha expuesto las diferencias con otras partes del mundo, expresó el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, en su blog este domingo.

Según Borrell, los combates en Ucrania “trajeron una mayor unidad a la Alianza Transatlántica e incluso un renacimiento de la misma”. “Las disputas en 2021 sobre la forma en que EE.UU. se retiró de Afganistán o cómo surgió la alianza AUKUS han desaparecido, por no hablar de los enfrentamientos más bien fundamentales bajo la Administración Trump”, indicó.

Durante la conversación, Borrell también ha reflexionado sobre los cambios transformadores que han barrido la Unión Europea desde que el Kremlin decidió iniciar la invasión a gran escala de Ucrania, trastocando el derecho internacional, las cadenas alimentarias y los precios de la energía.

Aunque técnicamente es el máximo diplomático del bloque, Borrell ha admitido que hoy en día se siente más como un “ministro de Defensa” debido a la creciente atención que se presta al suministro de municiones a Ucrania: la UE se apresura a cumplir su promesa de entregar un millón de proyectiles de artillería en los próximos 12 meses, que Kiev necesita urgentemente para montar su contraofensiva prevista.

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El alto diplomático afirmó que EE.UU., Canadá y los países europeos están unidos para ayudar a Kiev y comparten “un propósito común y la voluntad de pagar el precio de defender los principios del Estado de derecho internacional, la libertad y la democracia, atacados por las potencias revisionistas”.

“Lamentablemente, esta unidad transatlántica y del G7 ha ido acompañada de una mayor división política con el mundo emergente”, destacó, agregando que los países tienen percepciones distintas debido a sus diferentes historias, geografías y prioridades políticas.

En este sentido, Borrell instó a Occidente a “tomar en serio las expectativas y quejas de los países emergentes”. “No simplemente porque queramos su apoyo para las votaciones en la ONU sobre Ucrania, […] pero sobre todo porque en este mundo se está librando una batalla de narrativas y, aún más, una batalla de ofertas”, finalizó.