Esta ley, ratificada por el presidente de Argentina (Mauricio Macri), fue vetado debido a que los servicios públicos deben de ser pagados de acuerdo al costo de lo que usan, sino el país terminaría como Venezuela. Todo esto comenzó cuando, en diciembre de 2015 y junto con el Congreso, decidieron un cambio.
La pasada madrugada, con 37 votos a favor y 30 en contra, el Senado aprobó una ley (con el visto bueno de la Cámara de Diputados) buscaba que las facturas de electricidad, agua y gas vuelvan a ser las mismas cifras de noviembre de 2017.
Macri manifestó lo siguiente: “Esta ley nació sin ningún tipo de rastro de continuar porque claramente no está financiada y, los que no han votado, no han dicho de donde son los recursos (más de 110 000 millones de pesos, un aproximado de 4400 millones de dólares).
Según el portavoz del Ejecutivo, en las próximas horas se conocerá del decreto por el que se oficializa el vetar.
Convencido de que es necesario reducir el déficit fiscal, tras la fuerte pérdida del valor de la moneda del peso, conllevó al Gobierno de Macri a comerciar un crédito a negociar con el Fondo Monetario Internacional (FMI), con el objetivo de decir las cosas con la veracidad que se merece.
Con esto, Argentina permitirá seguir creciendo y fortaleciendo cada vez más, ya que, con siete trimestres de crecimiento, aún no es suficiente.
L.V.V.L.
