Activistas nicaragüenses reclaman que Daniel Ortega salga del poder como sea

La represión sistemática ejercida por el Gobierno de Daniel Ortega ya ha cobrado la vida de al menos 300 personas en Nicaragua, según un informe de la ONU.

Activistas nicaragüenses realizaron un plantón frente a la embajada de Nicaragua. Foto: El Comercio

Ante la crisis social y política que vive Nicaragua luego que diversas protestas contra el Gobierno de Daniel Ortega hayan generado una violenta represión sistemática por parte de este poder, tres activistas nicaragüenses visitaron el Perú como parte de una gira latinoamericana de denuncia por la violación a los derechos humanos que se viene dando en su país y el abuso de un gobierno que se niega a dejar el poder.

Conscientes de las implicancias que genera salir de su país para denunciar estos hechos, Ariana McGuire, coordinadora universitaria por la Democracia y la Justicia y Carolina Hernández, representante de un movimiento ambientalista, informaron a El Comercio de los abusos que está sufriendo su población desde que decidió seguir saliendo a las calles a protestar a pesar de que saber que probablemente alguien vaya a morir.

En esa línea, Hernández indicó que lo que sucede en Nicaragua no es normal. “Lo que está pasando desde el 18 de abril es algo que se salió de los límites […] Daniel Ortega no acepta la cantidad de asesinatos, la represión, las torturas que está ejerciendo desde el gobierno”, señaló.

Hernández refirió que no pensaron que esta situación de crisis la volverían a vivir y explicó que, si bien reconoce que Daniel Ortega fue uno de los comandantes de la revolución sandinista, a éste se le olvidó que luchó con la bandera de los derechos humanos y ahora está luchando con la bandera de la ambición. “Daniel Ortega ha traicionado a la revolución”, enfatizó.

Por su parte, McGuire expresó que “los presos políticos no tienen acceso a un abogado ni a un juicio justo y la tortura es un tema que hay que enfatizar porque está en unos niveles de deshumanización total. A la gente la están abusando sexualmente de formas horrorosas”.

Finalmente, ambas jóvenes indicaron que Nicaragua no se va a quedar no se va a quedar sin jóvenes, a pesar que muchos están huyendo de la represión.  “El 60% de la población nicaragüense son jóvenes y muchos de ellos están demasiado determinados a no salir del país y a seguir la lucha desde adentro […] Es nuestra responsabilidad porque es nuestro futuro el que está en juego. Nadie merece vivir en las condiciones que Daniel Ortega impone y queremos luchar contra la dictadura, no la vamos a permitir”, puntualizó.

A.A.M.