Las actividades religiosas, del norte del país, se encuentran en complicaciones al no poder coincidir en las decisiones de como celebrar la santa misa ante el estado de emergencia que obliga a la toda la población del Perú a acatar la cuarentena.
Debido a que se han ido reportan casos de infectados de Covid-19 en el norte del Perú, las principales autoridades religiosas se han mostrado a favor y a su vez en contra por las decisiones emitidas por el Ejecutivo.
Por su parte, el arzobispo metropolitano de Piura, José Antonio Eguren Anselmi, anunció que a partir de hoy las misas presenciales serán suspendidas en su totalidad hasta nuevo aviso en cualquier iglesia o templo de la región.
El titular eclesiástico de Piura precisó que los sacerdotes deberán celebrar sus misas de manera privada y transmitirlas por algún medio de comunicación ya sea la televisión, radio o redes sociales.
No obstante, un escenario totalmente distinto se vive en Trujillo. El día de ayer se realizó la misa dominical y la catedral se encontraba repleta, pero las iglesias evangélicas si suspendieron sus actividades.
El arzobispo metropolitano de Trujillo, monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, declaró que las iglesias de esta localidad no serán cerradas y la santa misa se realizará con total normalidad.
Además, precisó que las ostias serán entregadas en las manos de los fieles y que los saludos de la paz serán a través de gestos y no de abrazos o estrechamiento de las manos como se suele hacer habitualmente.
L.F.C.
