El pintor y escultor, Eduardo Arroyo, falleció ayer en Madrid (España) a la edad de 81 años. Era uno de los artistas más importantes del arte español del siglo XX.
En la capital francesa (París) comenzó su actividad como pintor y además se dedicó al periodismo. El artista autodidacta se conectó con los círculos intelectuales y artísticos de vanguardia, realizando un rol importante de los sectores progresistas de la cultura francesa.
Como pintor expuso mayormente en los más importantes centros artísticos de América y Europa. Fue en España en donde, su primera exposición (1963), fue clausurada por la censura.
Premios
– Premio a la mejor escenografía (1981)
– Premio Nacional de Artes Plásticas (1982)
– Premio de la Fundación Simone el Cino del Duca (2005)
Obras
Entre sus trabajos de escenografía destacan Off limits, de Adamov (1969 y 1972); Wozzeck, de Alan Berg (1971); En la jungla de las ciudades, de Brech (1973) y La vida es sueño, de Calderón.
Además, no abandonó su vocación literaria y en 1974 publicó Treinta y cinco años después, que es una denuncia contra el régimen franquista. En 1986 estrenó, en Múnich, su primer drama Bantam.
L. V. V. L.