Las proyecciones a corto plazo sobre la economía de EE. UU. son positivas y según el Fondo Monetario Internacional (FMI), poseerá “la expansión más larga del registro”.
En cambio, son las actuales decisiones sobre el comercio internacional las que se transforman en un problema para la economía estadounidense. Así es como lo sostuvo Christine Lagarde, presidenta de la entidad.
“Los obstáculos al comercio no son buenos para el crecimiento. La guerra comercia no crean ganadores”, resaltó Lagarde. Teniendo en cuenta que EE. UU. pone los aranceles a las importaciones de productos provenientes de Canadá y la Unión Europea.
“(Las medidas proteccionistas) probablemente alejarán al mundo de un sistema comercial basado en normas, abierto y justo, con efectos adversos para la economía de EE. UU. y los socios comerciales”, afirmó la presidenta.
El otro riesgo latente en la economía estadounidense a mediano y largo plazo es la inflamación que, según Lagarde, debería ser “sorpresiva”.
Asimismo, las proyecciones de inflamación para EE. UU. se situaron en 2.8 % para el presente año y 2.4 % para el 2019.
Los avisos del FMI se dieron un día después de que la Reserva Federal de EE. UU. fijaran un alza en los tipos de interés por segunda vez en el año en 25 puntos básicos, lo que pone las tasas entre 1.75 % a 2 %, su mayor nivel desde el 2008.
El alza vino junto a un anuncio de la entidad que mostró dos alzas más para el presente año.
Estas alzas de tipos de interés se podrán realizar en sus reuniones de política monetaria de la Reserva Federal en el mes de setiembre y diciembre, cuando se actualiza el marco macroeconómico y se hace la conferencia de prensa de su presidente, Jerome Powell.
J.L.