El festival Viña del Mar 2020 se inauguró en medio de protestas violentas. Varios manifestantes -armados con palos, piedras y bombas molotov- se reunieron a los alrededores de la Quinta Vergara y se enfrentaron a los carabineros.
Según información de El Mercurio, muchas personas con el rostro cubierto empezaron a mover las vallas que habían sido colocadas como medida de seguridad por los organizadores, mismos que habían previsto esta situación y días antes del evento anunciaron un operativo para evitar cualquier tipo de boicot.
Además, se supo que en ese mismo lugar se quemaron ocho vehículos y atacaron al Hotel O’ Higgins que terminó con las ventanas rotas. Por ese motivo, el personal del hotel tuvo que evacuar a los huéspedes y equipos de prensa que esperaban transmitir el festival. Por su parte, las autoridades respondieron a esto y usaron dos carros lanza aguas y gases para controlar la situación
Las protestas en contra de la realización del festival fue hecha con tiempo y usaron el #SinJusticiaNoHayFestival que se volvió tendencia en Twitter. Paula Arriagada, abogada de los derechos humanos y que también se encontraba en la protesta dijo que «hoy Chile está paralizado por completo. Estamos en un estallido social y una crisis profunda que la clase política no ha sabido llevar adelanta con éxito, sino que se ha empeñado en reprimir las manifestaciones».
D.P.G.
