El chamán, temido y respetado es una figura primordial en los pueblos amazónicos. Su poder reside en el conocimiento que tiene sobre los seres vivos. En su cosmovisión, desde un tronco seco, hasta un ave o tal vez una serpiente están proporcionados de alma o consciencia propia, por lo que el reconocimiento que se le concede al chamán se debe a su capacidad de estar en contacto con ellos, gracias a los viajes dentro de la consciencia que realiza.
En otras palabras, el uso de los acrílicos en ocho obras, el pintor loretano, Brus Rubio Churay (1983), muestra en la exposición BiN+E RE+K+(Tizón de este mundo). El tabaco del abuelo tigre’, en la que nos dibuja por lo que atraviesa el chamán, que incluso muda su condición de hombre y se transforma en jaguar. Estará hasta el 8 de abril, en el C.C. Peruano Japonés.
Por el titular de la muestra, es un homenaje al tío del artista, que, por el idioma del pueblo murui, se llama BiN+E RE+K+ (Tizón de este mundo) y a su abuelo, un gran sabio que hacía uso del tabaco del tigre, una planta ancestral que se usa para curar males.
RESCATANDO AL CHAMÁN
Rubio aclara que decidió hacer esta exposición para revalorar el papel de guía que tiene un chamán, ya que visualiza que poco a poco se van olvidando todos los saberes que adjuntan esta importante figura, incluso en su mismo pueblo.
Comprender la cosmovisión de un pueblo como los murui puede ser complejo, por lo lejano que resulta para algunos. ‘BiN+E RE+K+ (Tizón de este mundo). El tabaco del abuelo tigre’ nos acerca a una narración personal de las experiencias del artista cuando era niño y, mediante estas imágenes, podremos conocer y valorar la importancia que tiene el chamán. Porque, como resalta Brus Rubio, profundiza en una historia y las enseñanzas en encontrarse con uno mismo.
J. L.