Explorar la región de Tacna es sumergirse en una experiencia que nos conecta con momentos cruciales de nuestra historia y resalta el arraigado amor patrio de su población. Aquí, la naturaleza nos brinda pródigos paisajes de una belleza singular, se revelan vestigios arqueológicos de gran importancia, nos deleita con una gastronomía irresistiblemente deliciosa maridada con el néctar de los viñedos que producen piscos y vinos de calidad.
Tacna, conocida como la «Ciudad Heroica», ha sido testigo de un pasado lleno de eventos trascendentales. Desde su fundación en 1821, la ciudad ha desempeñado un papel fundamental en la lucha por la independencia del Perú.
A continuación, repasemos cuáles son sus principales atractivos turísticos del departamento de Tacna:
Plaza de Armas
Ubicada en el Paseo Cívico, la Plaza de Armas presenta una imponente fuente ornamental compuesta por varias fuentes que se destacan por su altura de seis metros. Este monumento histórico, un símbolo representativo de Tacna, fue traído desde Bruselas, Bélgica, por la famosa compañía constructora Eiffel en 1869, como obsequio del gobierno del presidente José Balta.
La fuente principal, de seis metros de diámetro, está coronada por un conjunto escultórico clásico que simboliza las estaciones del año. Además, sobre la fuente mayor, se encuentra un grupo de cuatro niños desnudos tomados de la mano, acompañados por símbolos como un remo, un fardo, cabos de ancla y un timón de bote, que representan el comercio, la industria y la navegación.
Catedral
La Catedral, una obra de estilo neorrenacentista diseñada por arquitectos franceses, es el edificio religioso más destacado de la Ciudad Heroica. Su construcción comenzó en 1875 en el mismo sitio donde se encontraba el antiguo templo. A pesar de desafíos como la Guerra del Pacífico, la catedral se completó y se inauguró el 28 de agosto de 1954 durante el gobierno de Manuel Odría.
Construida con piedra de cantería de los cerros Arunta e Intiorco cercanos a la ciudad, esta imponente catedral fue dirigida por el ingeniero y arquitecto polaco N. Miney.
Arco Parabólico
El Arco Parabólico, un monumento de 18 metros de altura situado en el Paseo Cívico, rinde homenaje a los héroes de la Guerra del Pacífico, el almirante Miguel Grau y el coronel Francisco Bolognesi. Diseñado por técnicos alemanes, este arco fue construido con piedra de cantería de color rosáceo. Su forma ovalada refleja el diseño del Paseo Cívico, aunque algunos historiadores sugieren que también puede representar la trayectoria de un proyectil de cañón disparado al cielo.
Casa de Francisco de Zela
La Casa de Francisco de Zela, hogar del precursor de la independencia peruana que proclamó la libertad en 1811, exhibe documentos relacionados con su familia y una galería fotográfica que cuenta la historia de la revolución de Zela en Tacna.
Museo Ferroviario
Ubicado en la intersección de las calles Gregorio Albarracín y 2 de Mayo, el Museo Ferroviario ocupa parte de la estación ferroviaria construida en el siglo XIX por la compañía inglesa The Arica & Tacna Railway. Esta vía férrea internacional, la única en Perú, fue la segunda en construirse durante el gobierno del mariscal Ramón Castilla. Iniciando su servicio en 1856, estuvo en concesión por 99 años.
El Ministerio de Comercio Exterior y Turismo entregó al Gobierno Regional de Tacna el nuevo Museo Ferroviario, tras una inversión de 10.5 millones de soles otorgados por el Plan Copesco Nacional. Las mejoras incluyeron la restauración de locomotoras, coches vagones y edificaciones, así como la creación de salas de exposición, tienda y cafetería.
Ruta del Pisco y Vino
En este valle, conocido por sus técnicas tradicionales de cultivo, se producen y comercializan vinos, piscos y macerados. Las bodegas vitivinícolas son de visita obligatoria para degustar la famosa picante a la tacneña y disfrutar de los productos de exportación de la región, que se benefician del clima soleado y ventoso.
Picante a la tacneña
Uno de los platos más representativos de Tacna es el sabroso y emblemático potaje de la Ciudad Heroica, que ha logrado posicionarse como un plato central en festividades y es un orgullo para los habitantes de la región.
Se trata de un plato tradicional que combina magistralmente insumos oriundos del Perú como las milenarias papas, ajíes y la carne de llama o alpaca con ingredientes traídos de Europa como la carne de vaca y de cordero, la cebolla y el ajo. Se creó originalmente como una forma de aprovechar las menudencias y las especias sobrantes de otras preparaciones culinarias, pero se convirtió en un plato popular y símbolo de identidad de los tacneños.