Las autoridades paquistaníes en noviembre de 2016, ordenaron al personal de las escuelas de Turquía a salir de Pakistán debido a que el embajador Sadık Babür Girgin, había indicado que las instituciones estaban siendo vinculadas con Fatehullah Gulen, un clérigo con sede en Estados Unidos, quien está siendo acusado de intentar un golpe de estado a dicho país por el presidente Recep Tayyip Erdoğan.
Debido a esta situación el diario Daily Pakistan, informó que se registró el secuestro a la familia del ex director de la escuela Pak-Turk, Mesut Kaçmaz, quien había solicitado asilo del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). La familia habría sido brutalmente detenida el 27 de septiembre a las 2:10 am desde la ciudad paquistaní de Lahore.
Fatih Avcı, profesora de lengua turca de profesión y quien también había solicitado el asilo del ACNUR desde noviembre de 2016, manifiesta que se encontró en el momento y lugar exacto en donde los 15 agentes policiales empujaban a la familia de Kaçmaz, observó como agredían a la esposa tirándola para ponerle de pies, sus hijas adolescentes se encontraban llorando, cuando el ex director protestaba por el ataque.
Avci, al ser testigo de la injusticia que se estaba cometiendo, increpó a las autoridades, siendo también arrestada. Por lo que se investigó, los secuestros de ciudadanos turcos de Malasia se produjeron en el contexto de las declaraciones del presidente turco Erdoğan, que afirmó en septiembre de 2016 que «ningún país o región de todo el mundo será un refugio seguro para los miembros del movimiento Gülen».
El Ministerio de Justicia de Turquía anunció el 13 de julio que 50.510 personas han sido arrestadas y 169.013 han sido objeto de acciones judiciales cargos de golpe de Estado. Cabe recordar que Turquía sobrevivió a un intento de golpe militar polémico el 15 de julio de 2016 que mató a 249 personas. Inmediatamente después del golpe, el gobernante gobierno del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) junto con el presidente autocrático de Turquía, Recep Tayyip Erdoğan, culparon al movimiento Gülen.
E.D.E