El magistrado Gustavo Gutiérrez Ticse recalcó que los fallos del Tribunal Constitucional (TC) son inapelables, luego que Diego Uceda, alcalde de La Molina, no descartara acudir a instancias internacionales sobre la orden de destruir el ‘muro de la vergüenza’ en un plazo de 180 días.
«Hay una ponderación de los derechos humanos: uno es la libertad de tránsito y el principio de igualdad y la no discriminación frente a la tutela de seguridad, que ciertamente la Municipalidad de La Molina tiene plena potestad desarrollar los mecanismos de seguridad que crea convenientes», explicó en entrevista a Hora y Treinta en Canal N.
Asimismo, el magistrado señaló que la división irregular que separa los dos distritos de La Molina y Villa María del Triunfo, no solo impacta en el libre tránsito, “sino sobre todo genera un evidente acto de discriminación en perjuicio de personas que tienen menos recursos”.
Ante las declaraciones de Uceda, quien asegura que la estructura divisora es una pirca limítrofe. Gutiérrez sostiene que “una pirca es un muro. En término andino es una edificación para proteger una propiedad. (…) Lo que ha hecho el Tribunal Constitucional es disponer que ese muro se demuela en un plazo racionable sin perjuicio sin que tomen otras medidas complementarias”.