A diferencia del cáncer en adultos, el cáncer infantil no tiene una prueba de detección temprana y se debe estar muy atento a las señales que puedan estar presentando los niños para un diagnóstico y tratamiento oportuno.
Este problema debe ser enfrentado por los padres buscando la información debida y la ayuda de especialistas para anticiparse ante cualquier señal que puedan dar sus hijos.
Si presenta fiebre durante varios días, falta de apetito, dolores de cabeza, náuseas, fatiga, pérdida de peso, dolores en los huesos, sangrado anormal, su piel luce moretones y ganglios inflamados es debido llevarlo a su médico de cabecera para hacer un diagnóstico de descarte.
Lo mejor es mantener la calma ya que estos síntomas también se pueden considerar con diferentes enfermedades como papera, cólera, infecciones gastrointestinales, entre otros.
Nunca está de más investigar para conocer acerca de las diversas enfermedades, siempre de la mano de tu médico de cabecera o cualquier otro especialista del tema.
J.A.G
