“Si no como panetón, no engordo”, uno de los mitos más populares en Navidad

El gusto por el buen comer incrementa en la temporada navideña con los banquetes que se realizan a fin de año. Sin embargo, dejamos de lado el cuidado de nuestra alimentación. Conozca aquí los mitos y verdades sobre la comida en exceso para comer sin culpa.

Según cifras del Centro Nacional de Alimentación y Nutrición del Ministerio de Salud (MINSA), Latinoamérica y el Caribe cuentan con el nivel más alto de malnutrición por exceso de peso en todo el mundo. Pero eso no es todo, según la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, una persona puede aumentar hasta 4 kg de peso en épocas navideñas.

Hay muchos mitos alrededor de los alimentos que consumimos en las fiestas de fin de año. Lo más preocupante es la tendencia del aumento de peso y el riesgo de sufrir sobrepeso o diabetes por el exceso de alimentos. Por ello, la Dra. Suzanne Cortez Abanto, Gerente de Salud de Sanitas, nos habla de algunos mitos y verdades de esta fecha:

Verdadero. Está comprobado que el promedio de peso que una persona puede aumentar en estas fechas es de aproximadamente 3 kilos. Por ello, es necesario balancear los alimentos que se ingieren no sólo en Navidad, sino también en el resto del mes.

Falso. Todo lo consumido durante diciembre, además de afectar al peso de una persona, podría repercutir también en los niveles de azúcar, colesterol y triglicéridos. Eso significa que podremos estar en riesgo de sufrir de diabetes, sobrepeso u otra enfermedad crónica no transmisible.

Falso. Si bien evitar el consumo del panetón puede contribuir, eso no exenta de las calorías y el azúcar que obtenemos al consumir otros elementos tradicionales de la noche, como el chocolate o algún otro postre.

Verdadero. El alto consumo de azúcares en esta fecha hace que nuestro cuerpo tenga la sensación de tener más hambre. Esto, debido a que nuestro organismo puede detectar si necesita o no comer a través de la glucosa. Al tener una alimentación excesiva, los niveles de glucosa pueden subir rápidamente por un momento y luego descender de manera igual de drástica, provocando la sensación de hambre más rápidamente que con otros alimentos.

Falso. Los aportes calóricos que recibimos al alimentarnos son distintos, y depende de lo que consumimos. El alcohol, por ejemplo, podría aportar “calorías vacías”, es decir, su consumo no aporta nada al organismo, pero aumenta el consumo calórico de toda la cena. Por otro lado, el consumo balanceado de carnes y verduras podrían aportar la misma cantidad calórica y, además, favorecernos con sus propiedades. Lo ideal es centrarnos no sólo en cantidad, sino también en la calidad de lo que consumimos.

Recuerde que una alimentación balanceada, acompañada de ejercicios, no sólo nos permitirán gozar de un buen peso e imagen. También nos ayudará a evitar enfermedades crónicas.

S.F.M.S.