Lamentablemente, alrededor de 40,000 atoros al año es lo que se producen en el sistema de alcantarillado de Lima debido a los desperdicios, residuos sólidos y sustancias prohibidas que arrojan las personas, obstruyendo y deteriorando de esta manera la red del servicio, señaló Pilar Alva Tafur, gerenta de Gestión de Aguas Residuales del Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima (Sedapal).
“El número de atoros es muy alto en nuestra capital porque estamos hablando más o menos de 40,000 atoros al año. Esto es un problema social que afecta a miles de familias, pérdida de tiempo, desabastecimiento de agua, activación de seguros y todo eso se podría evitar si se hace un adecuado uso de la red de alcantarillado”, manifiesta.
Asimismo, la funcionaria también indicó que al mes Sedapal recoge aproximadamente 300 toneladas de residuos sólidos, lo cual se evidencia que aún falta mucho por trabajar para una cultura de prevención en el cuidado del medio ambiente por parte de la ciudadanía.
Además, lamentó que no solo la población es la causante del congestionamiento de las redes de alcantarillado, al arrojar sus desperdicios, sino que también del sector industrial es cuando vierten sustancias prohibidas en este sistema llegando ocasionar un daño letal al planeta.
Sin embargo, asegura que este problema de obstrucción de la red de alcantarillado trae como consecuencia la aparición de aniegos en diferentes zonas de Lima, como las registradas en años anteriores, donde por varias semanas se vio interrumpido el servicio de agua y desagüe en perjuicio de los vecinos.
“Sedapal repone un promedio de 120 kilómetros de colectores anualmente. Deseamos incrementar esta cifra para beneficio de la población, pero también tenemos que trabajar la parte preventiva porque al arrojar fierros, bloques de cemento, ladrillos a las tuberías éstas se rompen y obligan a la reparación y rehabilitación”, acota.
Un buen uso del servicio
Según Alva Tafur, mencionó que la institución está empeñada en realizar un trabajo de sensibilización en el usuario con la finalidad de convertirlo en un “vigía de la red de alcantarillado”, para luego evitar daños en las tuberías y la ocurrencia de aniegos.
Recomendaciones
Finalmente agrega que para el sistema de alcantarillado se tiene muchas dificultades en nuestra ciudad, pero que al procurar no arrojar desperdicios, desmonte, grasas, aceites, etc. se contribuye al bienestar de la ciudad y a un buen uso de este sistema.
