Esta mañana, en el distrito de San Juan de Lurigancho, un grupo de policías de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) llegaron a la zona para inspeccionar un taller textil ubicado en jirón Kotosh. Donde se confeccionaba las mascarillas KN95 que resultaron ser falsificadas en plena cuarentena.
Al realizar el operativo, confiscaron 130 mascarillas empacadas para ser vendidas, otras 190 seguían en el proceso de elaboración, incluyendo más de 5 200 mil cortes de tapabocas. Mediante la investigación que emprendieron, llegaron a saber que los dueños de este local eran dos hermanos gemelos, que se encargan de hacerlas como distribuirlas.
El proceso de su confección, consistía en hacer los cortes y luego de eso, lo bordaban para que sea más creíble para sus posibles. “Al producto terminado le agregaban cintillos metálicos (para la parte de la nariz) y así sorprendían a las personas como una mascarilla KN95 que viene con una certificación”. Sostuvo el agente.
Lamentablemente, no es la primera vez que sucede una estafa de tan magnitud, el mes pasado, en el distrito de La Victoria, fueron embargadas ocho toneladas de mercadería adulterada que consistía en mascarillas y alcohol medicinal. Además, teñían productos falsificados como: talcos, tintes para cabello, jabón líquido, guantes, etc.
E.F.G.B