Fueron horas de negociación. Primero, Miguel Ángel Russo no tenía planeado dirigir su última práctica en Alianza Lima en las instalaciones de Esther Granda de Bentín. Hasta llegó junto a su representante para negociar su salida.
A Miguel Ángel Russo se le notaba incómodo y hasta bastante caliente. Claro, su intención era desligarse de Alianza Lima, ante la ola de malos resultados. Por ese motivo, el estratega le pidió a su representante sentarse a negociar su salida con los dirigentes íntimos.
En un inicio, la cláusula de recisión de contrato de Miguel Ángel Russo ascendía a los 120 000 dólares. Ojo, ese monto era el que habría tenido que pagar el técnico a la institución íntima. Sin embargo, la dirigencia y el estratega llegaron a un consenso.
Finalmente, Miguel Ángel Russo le habría dejado a Alianza Lima 90 000 dólares, y así logró sellar su salida del club íntimo, que no conoce la victoria hace 10 partidos (quedó eliminado de la Copa Libertadores y está en la décima posición de la Liga 1).
Por otro lado, medios argentinos afirman que Miguel Ángel Russo tendría todo arreglado para ser el próximo técnico de Huracán, que también no pasa por un buen momento en el fútbol argentino.
G.S.V.
