Cuatro periodistas de Venezuela, Cuba, El Salvador y Nicaragua participan en el V Programa de Acogida Temporal de Reporteros Sin Fronteras (RSF) España, que les ofrece alejarse tres meses de sus países para “desconectar y recuperarse física y psicológicamente” de las amenazas y otras muchas presiones que sufren.
Financiado por el Ayuntamiento de Madrid, es un programa de estancia, y establecimiento de redes profesionales.
En la presentación de esta edición, una de las periodistas que participa este año, Gabriela Cáceres, explicó que abandonó El Salvador tras recibir amenazas por publicar unos reportajes para El Faro en los que desvelaba las negociaciones del gobierno del presidente Nayib Bukele con las pandillas criminales.
“Ahora, en El Salvador, se está construyendo un gobierno que no nos va a volver a dejar hacer periodismo. Ha sido difícil seguir trabajando a distancia, pero puedo asegurar que ha marcado un antes y un después, por lo que es importante seguir aprobando este tipo de programas” de RSF, argumentó.
ACOSADOS, EXILIADOS
Según el Índice de Chapultepec 2022, en Nicaragua se produjeron más de 300 agresiones a periodistas, más de 700 ataques a medios de comunicación entre agosto de 2021 y el mismo mes de este año, y actualmente es el único país occidental sin un periódico impreso.
Néstor Arce, periodista nicaragüense del medio Divergentes y exiliado en Costa Rica, comentó que su profesión en Nicaragua “vive días oscuros”, pero es un periodismo que “no se cansa, se reinventa”.
“Hay más de 180 periodistas exiliados y tres medios de comunicación de referencia nacional confiscados, 27 radios comunitarias y tres canales de televisión local cerrados. Sin embargo, todavía quedan hombres y mujeres que, con valentía, siguen informando sobre la realidad que vive este país centroamericano”, declaró.
La periodista cubana Yadiris Luis, que trabaja en medios como eltoque.com y ADN, aseguró que dentro de Cuba es “imposible” hacer periodismo independiente y se lo relaciona con el “activismo político”.
“Es un periodismo que ha tenido que irse al exilio, dentro de la isla es imposible que sobreviva porque los periodistas cubanos que están hoy en Cuba son acosados, hostigados, sus círculos sociales son dinamitados y se quedan solos. Por eso digo que a los periodistas en Cuba no nos matan físicamente, nos van matando en vida”, denunció.
Para Alonso Moleiro, periodista del periódico español El País en Venezuela, el programa de RSF reafirma el “vínculo profundo con España” y agradeció la “hospitalidad, empatía y solidaridad” de la que está siendo testigo durante los tres meses del proyecto, hasta diciembre.
“Verdaderamente he podido desconectar. Siento una comprensión total por parte de la población española hacia lo que nos sucede más allá del entorno político, de las izquierdas y las derechas, y se agradece de verdad”, comentó.
Alfonso Bauluz, periodista de la Agencia EFE y presidente de RSF España, destacó que, gracias a las posibilidades de trabajar en remoto, “los cuatro periodistas se han comprometido con el ejercicio profesional” y pudieron seguir “buscando sus fuentes y tejiendo relaciones profesionales”, lo que les ha supuesto “un alto en el camino, pero para continuar la pelea”.
“Somos conscientes de que la situación en cuanto a populismos, tensiones políticas o dificultades económicas están haciendo que la polarización sea un fenómeno que sacude a todas las sociedades, y lo único que nos va a ayudar a evitar esa situación de polarización extrema es el mejor periodismo”, subrayó.