El mundial estuvo plagado de muchas sorpresas para el mundo del fútbol. Fue el primer mundial que gana Argentina, que se cuenta que llegó a la final por un arreglo con Perú. Perú mostró un fútbol excelente que pudo llegar a más, y fue el certamen en la que el equipo peruano cerró varias bocas derrotando con autoridad a una de las máximas potencias del futbol mundial del momento, Escocia.
Hace 44 años, Perú enfrentaba a Escocia en el estadio de Córdova un 3 de junio de 1978. El encuentro lo iban perdiendo los peruanos al minuto 14, y no era de sorprender a nadie, ya que el equipo europeo llegaba como una de las favoritas del torneo.
No obstante, Cubillas, Cueto y Quiroga demostraron que la selección estaba para derrotar a gigantes europeos. En el primer tiempo Cueto anotaría el empate y en el segundo tiempo, Quiroga atajaría un penal que aumentaría el animo de todos los peruanos.
Después de la hazaña del portero argentino, nacionalizado peruano, el nene cubillas empezaría su show con un espectacular gol de larga distancia que congelaría al portero escoses, no contento con ese gol, al minuto 77 marcaría uno de los mejores goles de la historia de los mundiales.
Un tiro libre desde el lado izquierdo del campo, engañando al portero y golpeando la pelota con la parte derecha del botín derecho, generando una comba que se clavo en el lado izquierdo de la portería. Este gol sorprendió todos en el estadio y en el mundo, por eso la FIFA lo catalogo como uno de los mejores de la historia de los mundiales.
Gracias a este encuentro, la selección peruana fue ovacionada por varios medios a nivel mundial y reconocieron la magia que tenía el jugador peruano.