El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, nombró a Flávio Dino, ministro de Justicia, como nuevo magistrado del Supremo Tribunal Federal (STF), y Paulo Gonet como fiscal general de la Procuraduría General de la República (PGR).
Tras estos nombramientos, Dino sustituirá a Rosa Weber y se convertirá en el primer exgobernador en ostentar un cargo en la STF. Además, Lula pasará a contar con una sola representante femenina, Cármen Lúcia, entre sus once integrantes del STF.
El ministro de Justicia se licenció en derecho en la Universidad Federal de Pernambuco y cursó una maestría en derecho constitucional. Con 26 años, consiguió su primer puesto como juez federal. Asimismo, ocupó cargos como presidente de la Asociación Nacional de Jueces Federales y miembro del Consejo Nacional de Justicia.
Posteriormente, en 2006 renunció a su cargo para entrar en política y fue elegido diputado federal por Maranhão (2007 a 2011). Además, asumió la presidencia de la Agencia Brasileña de Promoción Internacional de Turismo (Embratur) en el gobierno dela expresidente Dilma Rousseff (2011-2014).
En 2022, se unió al Partido Socialista Brasileño (PSB) para participar en los comicios. Sin embargo, pese a fue electo con un 63,38 % de los votos como senador de Maranhão, pidió licencia para asumir el Ministerio de Justicia.
Entre sus primeras acciones, Dino ordenó la apertura de una investigación de la Policía Federal para esclarecer quién ordenó el asesinato de la concejala feminista Marielle Franco y su chófer Anderson Gomes, en 2018. Hasta la fecha, solo se logró detener a un implicado en el homicidio.
Conservador y discreto
Por su parte, Gonet deberá sustituir a Augusto Aras, nombrado por el expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro (2019-2022). El fiscal estudió derecho en la Universidad Federal de Minas Gerais. Tiene una maestría y doctorado en Derecho Constitucional por la Universidad de Brasilia y otra maestría en Derechos Humanos de la Universidad de Essex, en Reino Unido.
Según O Globo, Gonet fue una las figuras principales del proceso ante el Tribunal Superior Electoral (TSE), que inhabilitó durante ocho años a Bolsonaro. En los años 90, como miembro de la Comisión Especial sobre Muertes y Desapariciones Políticas del Ministerio de Justicia, Gonet se posicionó en contra de responsabilizar al Estado por las muertes de opositores a la dictadura militar.
Asimismo, su candidatura contó con el apoyo de los jueces del STF Alexandre de Moraes y Gilmar Mendes. Algunos de los miembros del Partido de los Trabajadores (PT) no estuvieron de acuerdo con este nombramiento, pues lanzaron una campaña en su contra a través de las redes.