Los comentas están formados por un núcleo compuesto de hielo seco, agua, roca, y otras sustancias como amoniaco, metano y algún metal que, al estar a muy bajas temperaturas, provoca que permanezcan congelados.
A medida que su órbita los acerca al Sol y la temperatura ambiental sube, el hielo del núcleo se convierte en gas y desarrolla una atmósfera que tiene un crecimiento progresivo y, debido a su movimiento y al viento solar, se proyecta hacia atrás formando una cola.
El tamaño de los cometas puede varear según el núcleo, debido a que puede tener unos 10 kilómetros de diámetro, pudiendo llegar a los 50 kilómetros en algunos casos. No obstante, la cola, se puede extender millones de kilómetros, sobre todo a medida que esta se va acercando al Sol.
- Clasificación de los cometas:
– Cometas de período corto: «Los cuerpos celestes de período corto son aquellos que orbitan alrededor del Sol y se interponen con la órbita de la Tierra en un período de 200 años. De todos los cometas de período corto, el más famoso es el Cometa 96P Halley, que aparece una vez cada 76 años«, informa la agencia estadounidense.
– Cometas de período largo: «Son caracterizados por provenir de la Nube de Oort a un año luz de distancia con el sistema solar. Los cometas que provienen de esta nube esférica tardan 30 millones de años en orbitar el Sol», según la NASA.
- ¿Importancia de los cometas?
“Fueron estos cuerpos los que transportaron agua y compuestos orgánicos en su núcleo para depositarlos en la Tierra y formar los primeros signos de vida más tarde”, declara la NASA.
La Agencia Espacial Europea menciona que la abundancia de material volátil en los cometas es lo que los convierte en objetos importantes para ser estudiados.
“El material de los cometas representa lo más cerca que podemos estar de las condiciones que ocurrieron cuando nacieron el Sol y nuestro sistema solar”, expone el organismo espacial norteamericano.