Por Francisco Ugarteche Domínguez
(Lima 10/08/2020)
Para los médicos existen tres tipos diferentes de shock. El más común tiene que ver con el corazón, otro es por una baja considerable de líquidos en el organismo y le llaman shock hipovolémico y finalmente el shock anafiláctico, que es una reacción alérgica grave que ocasiona dificultad para respirar.
Hemos escuchado hablar de shock para reanimar a un enfermo mediante descargas eléctricas, el electroshock. En el cine, en la tv, vemos con relativa frecuencia el uso del desfibrilador, que es un aparato con el que transmiten un pulso eléctrico para despolarizar las células miocárdicas y estas puedan retomar su ritmo normal.
Los “paralaiser” producen una suerte de electroshock, pueden estar acoplados a los teléfonos celulares, muy prácticos y están de moda especialmente entre las mujeres y personal de serenos.
Otro es el shock que paraliza el corazón, la respiración, los brazos, las piernas, la mente y el bolsillo, el shock económico.
En la década de los 70 tuvimos varios ministros de economía y la mayoría se esforzó por aplicar medidas conducentes a arreglar el descalabro que ocasionaban las estatizaciones, el control de la moneda, el control de precios. Velasco tuvo a Morales Bermúdez, Guillermo Marcó del Pont y Amilcar Vargas Gavilano, mientras que Morales Bermúdez llamó a Luis Barúa Castañeda, Walter Piazza Tangüis, Alcibiades Sáenz Barsallo y Javier Silva Ruete. Cada uno con un grupo de medidas encaminadas a corregir las deficiencias más evidentes, cada uno con su respectivo “paquetazo”.
Fue en Chile donde pude observar el “paquetazo” más grande, para pasar rápidamente del control de cambios y de precios al libre mercado, de la estatización a la privatización, de la regulación excesiva a la desregulación.
A Augusto Pinochet lo acompañó un grupo de economistas de la Universidad de Chicago, con Milton Friedman, que acuñó el proceso como un “tratamiento de choque” o “terapia de shock”, por la velocidad con la que se adoptan estas medidas, que también generan una reacción sicológica en las personas.
Friedman fue un economista norteamericano, Premio Nobel, a quien atribuyen las bases de lo que después quedó en llamarse economía neoliberal, aquella que considera que la economía más eficiente está libre de toda intervención del Estado.
Fujimori juró que no habría un shock y fue lo primero que hizo.
