El presidente ruso, Vladimir Putin, anunció este miércoles que otorgará una semana de vacaciones retribuidas a nivel nacional para frenar los casos de COVID-19, además, instó a su población que muestren «responsabilidad» y se vacunen.
A partir del 30 de octubre comenzará el plan del gobierno para declarar una semana no laborable en todo Rusia, ya que este país registra un récord de muertes por COVID-19 en un día.
Durante una reunión televisada, Putin indicó que «el objetivo principal es proteger la vida y la salud de nuestros ciudadanos».
También agregó que, la gravedad de los casos en Rusia están relacionados con las bajas tasas de vacunación del país.
Este miércoles, Rusia ha registrado más de 34 mil nuevos casos de coronavirus y un total de 226 353 muertes, la cifra más alta en el continente Europeo.
Tras estas cifras, las autoridades rusas han sido acusadas de restar importancia a la escala de la pandemia.
Cabe recordar que, Putin ya había introducido vacaciones pagas durante los picos de coronavirus en mayo.
Restricciones de Moscú
Esta decisión, se anunció un día después de que el alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin, ordenara las primeras restricciones de coronavirus en la capital.
El ministro de Salud, Mikhail Murashko, declaró ante la prensa que su sistema de salud estaba operando bajo una presión cada vez mayor, y dijo que el «objetivo principal» era aumentar las tasas de vacunación.
Las autoridades, advirtieron estiman que el número de hospitalizaciones puede aumentar a un ritmo mayor que en oleadas anteriores.
L.P.C
