El pasado 10 de abril, a través del secretario nacional de disciplina de Acción Popular, Luis Salas Astorga, remitió una carta al congresista y vocero en el Congreso, Darwin Espinoza, para comunicar el procedimiento de expulsión en su contra.
Este proceso de expulsión tiene como a su supuesta implicación en el caso Los Niños. Según la denuncia constitucional presentada por la Fiscalía, los parlamentarios involucrados podrían haber cometido delitos de organización criminal y tráfico de influencias.
Además, se está llevando a cabo un proceso sumarísimo contra Espinoza por el presunto uso no autorizado de un inmueble propiedad del partido, ubicado en Chimbote. Por otro lado, el parlamentario no ha emitido ningún comentario sobre el proceso de expulsión iniciado por su propia agrupación política
Según un reportaje de un medio local, el parlamentario Espinoza había solicitado en enero del año pasado, 10 mil hojas bond a la Oficina de Abastecimiento del Poder Legislativo para imprimir fichas de afiliación y lograr inscribir a su partido Movimiento Regional Adelante Ancash.
Darwin Espinoza aparentemente usaba su oficina parlamentaria para realizar proselitismo político personal. El personal de su despacho realizaba el trabajo de buscar firmas necesarias para conseguir la inscripción de su Movimiento y la verificación de los “nuevos” militantes. Además, para la verificación, se ingresó al sistema de Reniec usando la cuenta de consulta cedida por el congresista.
Ante esto, la Procuraduría General del Estado anunció a través de sus redes sociales que está recopilando información para determinar los presuntos delitos cometidos por el congresista Darwin Espinoza.
A raíz del reportaje, el partido Acción Popular también se pronunció, señalando que se evidencian «actos de traición al partido perpetrados por el legislador Darwin Espinoza al intentar registrar una nueva organización política, lo que ha llevado a la Secretaría de Disciplina a iniciar un procedimiento sumarísimo de expulsión en su contra.
