Tras la aprobación en referéndum del Brexit por parte de la mayoría de la población del Reino Unido en 2016, todavía se siguen discutiendo los términos con los cuales el Reino Unido abandonará la Unión Europea en los próximos años, en una negociación que se hace difícil para los intereses británicos, sobre todo en lo referido a materia económica.
Ya lo ha advertido ahora la primera ministra del Reino Unido, Theresa May, quien ha hablado de las llamadas “verdades duras” que debe afrontar su nación como consecuencia del Brexit, entre las que ha destacado la pérdida de un mercado único y con ello, el fin del estilo de vida que actualmente se lleva en las islas británicas.
En el discurso, dado en la Mansion House de Londres, May indicó que lo que se está buscando en las negociaciones de los acuerdos de salida de la UE es garantizar que este concuerde con las necesidades de la economía británica, exhortando a la coherencia por parte de la UE teniendo en cuenta los antecedentes de acuerdos comerciales alcanzados por el organismo supranacional con otros países del mundo.
Theresa May espera que el acuerdo entre el Reino Unido y la UE, esté listo en octubre, que es el plazo máximo de demora a fin de que el Parlamento Europeo pueda aprobarlo. La primera ministra se muestra esperanzada de que los términos del acuerdo se logren consensuar antes de octubre, poniendo su confianza en el interés que tienen ambas partes por llegar a puntos en común.
L.I.P.R.